Con tres pruebas reinas la Fiscalía sustentó las razones por las que Ricardo Andrés Carvajal Salgar, capturado como presunto coautor del atentado con carro bomba en la Escuela General Santander que dejó 21 personas muertas, entre ellas el autor material del hecho identificado como José Aldemar Rojas Rodríguez alias el ‘Mocho’ y más de 50 heridos.

Las diligencias judiciales que se llevaron a cabo este sábado se realizaron con gran hermetismo por tratarse de un tema de seguridad nacional, sin embargo, pudo conocerse que en la audiencia la Fiscalía destapó evidencias claves contra quien es hasta el momento el único capturado por el acto terrorista.

Las autoridades llegaron este viernes a la bodega en el sur de Bogotá en donde desde noviembre estuvo estacionado el carro con el que se hizo el atentado, luego de ser trasladado a la capital desde Arauca.

En ese sitio la dueña de la bodega dijo a los investigadores que el ‘Mocho’ fue el que contrató la bodega y que pagó en un día varios meses de arriendo pero nunca volvió a ir. Además, la mujer narró que quien pagó el último arriendo fue el hombre capturado quien, aseguró, pasaba permanentemente a revisar el carro.

De esa forma encontraron las autoridades el nexo entre Carvajal, el vehículo con el que cometieron el atentado, y alias el ‘Mocho’.

Por otro lado, la Fiscalía también reveló la grabación de una interceptación a una llamada en la que se escucha como el hombre le dice a otra persona, quien es procesada por narcotráfico, «pusimos la bomba en la general Santander. Nos tocó encaletarnos».

Hacia las 12:30 m el juez legalizó la captura, allanamiento e incautaciones. 

A las 2 de la tarde se decretó un receso en la audiencia que continuó pasadas las 3:30 pm. Sobre las 5:10 de la tarde terminó la imputación de cargos en la que la Fiscalía le imputó en grado de coautor los delitos de terrorismo agravado, homicidio agravado en concurso, tentativa de homicidio agravado, daño en bien ajeno agravado y transporte de explosivos agravado. Carvajal no aceptó los cargos.

Por todo esto, el ente acusador solicitó que a Carvajal se le diera medida de aseguramiento intramural por considerar que es un peligro para la sociedad, medida que fue acogida por el juez, quien aceptó al cierre de la audiencia la interferencia razonable de Carvajal en el atentado y decidió enviarlo a prisión preventiva.

Sin embargo, a la salida de la audiencia, que se produjo cerca de las 10 de la noche, Carvajal volvió a decir que era inocente, que no conoce al autor material de los hechos y que además también se solidariza con las víctimas, aunque reiteró que no tuvo participación en los hechos.


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