Marta Lucía Ramírez, candidata presidencial colombiana, pidió hoy que los países latinoamericanos asuman “cuotas” de acogida a los venezolanos que están abandonando su país por las crisis.

“Lo que tiene que hacer el gobierno colombiano es pedir a América Latina que se definan unas cuotas de migración de la población venezolana; que cada país asuma una cuota de esta migración para que dé por un tiempo máximo de dos años un permiso de residencia, de trabajo y una atención mínima”, recomendó Ramírez en un encuentro con corresponsales internacionales.

Ramírez aspira liderar la coalición de derechas tras una consulta que se celebrará el próximo domingo. Comparecerá en los comicios como líder del movimiento Por una Colombia Honesta y fuerte.  Tendrá como rivales a Iván Duque, del uribista Centro Democrático, y a Alejandro Ordoñez, también conservador.

La aspirante presidencial aseguró que lo que vive Venezuela es una tragedia humanitaria, a la que Colombia no puede ser ajena, pero “tampoco puede echarse sobre sus hombros sola”.

«Nos queda grande y se da en un momento en que la economía colombiana está en crisis; la institucionalidad está en crisis, y la inseguridad desbordada. Entonces si pretendemos nosotros asumir toda esta carga terminamos hundiéndonos nosotros y ellos», aseveró.

Diariamente, unos 35.000 venezolanos cruzan la frontera con Colombia en busca de alimentos y medicinas o para huir definitivamente de la crisis.

Según los últimos datos facilitados por Colombia, unos 550.000 venezolanos se han asentado definitivamente en el país.

A juicio de Ramírez, la situación se ha agravado porque el gobierno del presidente Juan Manuel Santos ha buscado priorizar un interés distinto al nacional. “El interés del gobierno fue firmar un acuerdo con las FARC. cuando debieron primar la defensa de la democracia en Venezuela”, aseveró.


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!