Era un divorcio inevitable. La escudería Red Bull dejará de utilizar motores Renault al término de esta temporada y a partir de 2019 competirá con los de Honda, anunciaron las tres partes implicadas en un comunicado este martes.
Las relaciones entre la escudería austriaca y su proveedor de motores después de 12 años estaban deterioradas y las victorias habían dejado de ser habituales.
«Este acuerdo por varios años con Honda marca el inicio de una nueva y emocionante etapa para Aston Martin Red Bull Racing en su lucha no solo por la victoria en los Grandes Premios sino también por los títulos mundiales, lo que siempre ha sido nuestro objetivo», confirma el máximo responsable de la estructura austriaca, Christian Horner.
El compromiso de Red Bull con Honda, que equipa desde ests año Toro Rosso, escudería filial de Red Bull Racing, es por dos temporadas. El motor francés, de todos modos, era más conocido como TAG-Heuer, la célebre marca suiza de relojes de alta gama, que Renault.
El compromiso con Honda debería ser por dos temporadas. Así se dejaría la puerta abierta a una llegada como suministrador de motores de Aston Martin (actual patrocinador de Red Bull) a partir de 2021, cuando una nueva reglamentación técnica entrará en vigor.
Según Renault, que hace dos años volvió a convertirse en una escudería constructora en el mundial de F1 y que espera luchar por el título de aquí a 2020, «esta evolución es natural para Renault y para Red Bull Racing teniendo en cuenta sus respectivas aspiraciones».
Las relaciones entre Renault y Red Bull se habían degradado en los últimos años debido a la disminución de las victorias.