Golpeado por Ferrari desde el inicio de la temporada 2017 de la Fórmula 1, Mercedes debe arreglar sus problemas con los neumáticos, por ahora sin explicación, este fin de semana en el Gran Premio de Canadá si quiere evitar una crisis profunda.

«Es doloroso, pero no somos los favoritos para el campeonato este año», reconoció Toto Wolff, director ejecutivo de Mercedes, al comentar el 1-2 de Ferrari con Sebastian Vettel y Kimi Raikonnen en el Gran Premio de Mónaco.

En el Principado, la escudería alemana no sólo perdió la ventaja en la clasificación de constructores, también gran parte de sus ilusiones. «Necesitamos levantarnos para demostrar una vez más que somos el equipo a vencer. Todavía quedan 14 carreras y todo está completamente abierto», analizó Wolff.

El Mercedes del británico Lewis Hamilton, que partió decimocuarto en Mónaco y terminó en la séptima plaza, experimentó por segunda vez en tres carreras grandes dificultades cuando empleó neumáticos ultra-blandos.

Si bien la marca de la estrella pensó que había avanzado en este tema durante las pruebas en Bahrein a mediados de abril, el difícil fin de semana en el Principado los puso de cara a una cruel verdad.

Ansioso de no dejar escapar a Vettel en la clasificación de pilotos, Hamilton aborda con angustia el Gran Premio de Montreal y en 15 días el de Bakú, dos trazados con pocos giros rápidos y que no permiten llevar los neumáticos a una temperatura adecuada.

«Lo que no me tranquiliza es que tendremos en Canadá los mismos neumáticos de Mónaco», explicó Hamilton. «Por ahora, los ultra-blandos nos plantean un verdadero problema, y es principalmente lo que tenemos que tratar de resolver en estos días con los ingenieros», indicó.

Mercedes espera un fallo de Vettel

Niki Lauda, presidente no ejecutivo de Mercedes, quien públicamente activó la alarma con una predicción muy pesimista, aseguró: »Necesitamos encontrar una solución»

«Una cosa está clara: Vettel tiene que abandonar por lo menos una vez, de lo contrario esto terminó», advirtió sin titubeos el triple campeón mundial austríaco (1975, 1977 y 1984) al referirse a las esperanzas de título para Hamilton. «Ferrari está en un gran momento, si sigue así la brecha será enorme, alarmante», sentenció.

La maniobra que consistiría en intentar piedad de sus oponentes después de tres años de dominio abrumador podría sacarle a Mercedes una pequeña sonrisa, cuando faltan 14 Grandes Premios por disputar.

Pero la estrategia a la vez revela un cierto malestar.El consultor Eddie Jordan, uno de los hombres más respetados en la Fórmula 1, aseguró que Mercedes estaba preparando para el 2018 su retiro de la Fórmula 1, lo que rápidamente fue desmentido por Wolff.

Obviamente existen razones a corto y mediano plazo para la esperanza. En primer lugar, Lewis Hamilton ganó en Montreal el año pasado, un circuito donde se ha impuesto en cinco oportunidades. O como explicó el piloto francés de Force India a la AFP: «Mercedes dispone de medios inmensos: pueden cambiar completamente el coche si lo quieren».

«Es claro que Ferrari está rodando muy bien, pero ahora vienen unos circuitos donde Mercedes va a tener un poco más la ventaja, así que hay que esperar un poco más antes que enterrarlos», concluyó.


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