El presidente de Argentina, Mauricio Macri, admitió este miércoles que tras las dificultades económicas de los últimos meses el crecimiento va a disminuir, aunque aseguró que se retomará el año que viene.

En una conferencia de prensa en la residencia presidencial de Olivos, cerca de Buenos Aires, el mandatario expresó que pese a que la tormenta económica disparó la inflación, reducirla sigue siendo una absoluta prioridad.

Macri expuso que el origen de la inflación está en un Estado que gasta mucho más de lo que se paga de impuestos, y al que nunca le alcanza, y aunque no desveló cuál será el plan para reducir el déficit, descartó que el camino sea un alza de la presión fiscal: «No podemos pagar más impuestos».

La inflación es, en palabras de Macri, un gran problema que impide que lleguen las inversiones, ya que hay muchas compañías mundiales interesadas en llegar al país pero no trabajan en países con inflación.

Por ello, Macri destacó la importancia de lograr un acuerdo parlamentario para los presupuestos de 2019, que pretende cerrar con un ajuste que baje 1,3% el déficit fiscal, lo que acercaría mucho a Argentina a una inflación menor y la haría mucho más fuerte frente a cualquier tormenta que tenga lugar en el mundo.

El presidente negó que el gobierno presione a la baja las negociaciones salariales, al afirmar que siguen siendo absolutamente libres, y afirmó que cada sector en su realidad se irá acomodando teniendo en cuenta el avance de los precios.

En cuanto a los trabajadores públicos, el presidente argentino dijo que el ajuste de sueldos por la inflación estará limitado por los recursos de los que dispongan las distintas administraciones.


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!