Edilia Solano es una madre residenciada en Ureña, estado Táchira, que ha estado separada de su hijo por 15 días debido al cierre de la frontera colombo-venezolana.La ama de casa indicó a El Nacional Web que desde el cierre fronterizo, decretado por el presidente Nicolás Maduro en agosto de 2015, los controles para el tránsito de estudiantes entre Cúcuta y Ureña se han intensificado, por lo que uno de sus cuatro hijos, Cristian Rincón, tuvo que quedarse en el lado colombiano luego de que se venció su carnet universitario.?No le han entregado el carnet en la universidad?, explicó Solano sobre la razón por la cual el Ejército venezolano no ha permitido regresar a su hijo por el Puente Internacional Francisco de Paula Santander, en Ureña. Rincón ha tenido que permanecer 15 días en casa de un compañero de estudio mientras espera que su madre emita una petición ante la Dirección del Control de Frontera que se instaló hace más de seis meses en el Aeropuerto Internacional Juan Vicente Gómez de San Antonio del Táchira.Esta ciudadana asistió este martes al aeropuerto con todos los documentos necesarios para demostrar ante las autoridades que su hijo está esperando por la emisión de su carnet universitario. Este documento, junto con su cédula, constancia de inscripción, horario de clase y constancia de residencia, son algunos de los requisitos para que Rincón pueda regresar a su casa en Ureña. ?El primer día lo dejaron pasar, pero el segundo día no y él decidió quedarse allá?, sostuvo Solano. ?Ellos (los militares) tienen que darme un código que debe aparecer con su nombre cada vez que pasa por la acabala?, expresó la madre de Rincón sobre el sistema que se ha aplicado para identificar a los ciudadanos autorizados a cruzar la frontera. Sin embargo, las autoridades insistieron en que deben esperar que tenga el carnet para permitir su regreso. «No pueden hacer nada», indicó antes de retirarse del aeropuerto. Los nuevos controles en los accesos fronterizos también alejaron a Solano de otro de sus hijos:?El mayor se me graduó allá y por el cierre de frontera solo nos mantenemos hasta hoy por llamada telefónica».


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