Ciertamente que Serenísima sur es un artefacto estético de gran depuración a nivel de diseño y en cuanto al planteamiento mismo de la propuesta. Esta creación de Jefferson Quintana Cabrera (1987) es una apuesta conceptual que con un carácter muy sobrio pone sobre el tapete una cantidad de tópicos en torno al hábitat, así como en relación a la geografía humana que pulula en su derredor. De nuevo Camelia Ediciones, con este libro, apuntala su nivel de excelencia y de exquisitez.Uno de los aspectos que más me llamó la atención en relación con este trabajo fue la simultaneidad con la que devenían, por un lado, un conciso y si se quiere minimalista discurso verbal y por el otro el discurso visual. Así, tras una portada consistente de una ?trama? muy preciosista, que de alguna forma funciona como intriga y artificio del artefacto, aparece la descripción de un edificio, al igual que una brevísima representación de cada uno de sus habitantes. Toda esta ideación se encuentra de este modo concebida mediante la dualidad entre el texto versus la imagen de una serie de ?puertas-trama?.Toda una multiplicidad de lecturas irrumpe entonces cuando el lector-espectador no solo nota la idiosincrasia de los espacios interiores en las edificaciones tradicionales criollas, sino también el carácter y las diversas tonalidades de quienes viven en ellas. De modo que en este punto estamos ante un registro muy eficaz y sutil de un momento histórico clave en la posmodernidad autóctona venezolana. Aquí, sin duda alguna se despliega el poderoso ojo del detalle de Jefferson Quintana Cabrera. Es obvio que estamos ante un diseñador y artista plástico con una noción superlativa del fenómeno estético. Su trayectoria y reconocimientos, tanto a nivel local como internacional así lo acreditan. Es bueno en este  instante recordar que este autor fue galardonado tanto en Alemania como en Nueva York por su trabajo en el libro La tía Berta. Asimismo obtuvo los premios ?Libro entrañable? (Caracas, 2013) del Banco del Libro por la edición para niños Ratón y Vampiro, al igual que el premio Margot Benacerraf (Venezuela, 2012) por el mejor afiche de la película Brecha en el silencio (Venezuela, 2012). De la misma manera, el trabajo de este artista ha sido seleccionado para representar al país en distintas instancias internacionales, como por ejemplo la Bienal Iberoamericana de Diseño del año 2012.Hay, además, en la propuesta de Quintana Cabrera una suerte de estética de la mirada a la infancia que está patente en el punto de vista desde el cual se elaboran los discursos. Eso es obvio, asimismo, en el hecho de que una de las líneas de trabajo de este autor está focalizada en la piñatería, de forma que quizá esa perspectiva hacia lo primigenio reviste ciertos matices de lo idílico; de la aspiración a un paraíso perdido.Adicionalmente, la reflexión de Quintana Cabrera en lo que tiene que ver con el teatro y el trabajo que ha llevado a efecto en este género en tanto director de arte para diversas piezas le da una perspectiva privilegiada en torno a lo que es la problemática de la representación. A eso apunta ultimadamente su trabajo en Serenísima sur, en el sentido de volver a presentar tanto los espacios de las edificaciones, así como las escenografías humanas y el territorio del alma implícito en ello.Los aspectos formales en esta obra están extremadamente bien cuidados, cual mecanismo de relojería. Este trabajo es un deleite en sí para los amantes de los libros, de las artes y del coleccionismo en general. Este artefacto, sin duda ubica al diseño en Venezuela en la categoría de lo excelso. Aquí el lector-espectador se aproximará a la recreación de 74 puertas, con todo lo sugerente que ello implica y en donde subyace la invitación a descubrir quizá facetas de uno mismo en una suerte de juego de espejos, de analogías y correspondencias.Asistimos con este trabajo de Jefferson Quintana Cabrera a un momento excelso del diseño y de la plástica en confluencia con el texto. Sin lugar a dudas que este trabajo es una celebración de lo bello por lo bello.  Serenísima surJefferson Quintana CabreraCamelia EdicionesCaracas, 2014.


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