La esposa de George Clooney, Amal Alamuddin, está recibiendo amenazas de muerte por su trabajo como representante de Mohamed Nasheed, el primer presidente de las Maldivas elegido por votación popular. Ante esto, el actor decidió reforzar la seguridad en la casa que ambos comparten en Londres. Según informa el diario Business Times Internacional, el ganador del Oscar instaló cámaras de vigilancia en los alrededores de la propiedad ubicada en el condado de Berkshire, al oeste de la capital británica. «La seguridad es más para ella que para él. Las amenazas de muerte que recibe son bastante graves», dijo un oficial del distrito que está ayudando al también cineasta, Paul Harrison. La instalación de cámaras ocasionó problemas con sus vecinos, quienes le exigieron que redujera su altura, pues las había ubicado a seis metros del suelo. El protagonista de «Michael Clayton» accedió y las redujo a tres metros. De acuerdo a la revista Us Weekly, el actor construyó una habitación del pánico al interior de la mansión, con el objetivo de tener un lugar donde esconderse en caso de un ataque. Amal Alamuddin es una destacada abogada experta en derecho internacional, extradición y derechos humanos. Entre las causas que ha llevado se destaca la defensa de Julian Assange y el reconocimiento del genocidio armenio.


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