Este sábado continúa la Asamblea General de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), que arrancó este viernes en Charleston (Carolina del Sur, EE UU) con un llamamiento a la libertad de prensa en Latinoamérica y duras críticas contra algunos gobiernos de la región por su presión, de distintas formas, a los medios de comunicación.Durante cinco días, la SIP abordará los principales desafíos en el sector de la comunicación en Latinoamérica, especialmente la libertad de expresión, la violencia contra periodistas (11 muertos en el último semestre), la alta concentración de medios en manos de algunos gobiernos o el auge de la prensa digital y las nuevas tecnologías, entre otros asuntos.La jornada de este sábado cuenta con la participación del premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa, quien disertará sobre La Democracia y la Libertad de Expresión y será entrevistado por el periodista y escritor argentino Andrés Oppenheimer.La jornada de hoy comenzó con el panel «La mayoría móvil» y «La libertad de expresión en la web: lecciones recientes aprendidas en Europa y América Latina».»La mayoría móvil» planteará los retos, los problemas y las soluciones ante la preponderancia de los dispositivos móviles. Solo en Estados Unidos, 39 de los 50 principales sitios digitales de noticias captan la mayor parte de su tráfico a través de dichos dispositivos.América Latina: la «concentración de medios» en manos del EstadoEn una entrevista con Efe, el director ejecutivo de la SIP, Ricardo Trotti, subrayó la coincidencia de esta cita en Charleston con la nueva etapa abierta entre Estados Unidos y Cuba, una ocasión «propicia» para que Washington recuerde la situación en la isla y exija la libertad de los periodistas presos en Cuba.»Hemos insistido en que no puede quedar fuera (de la agenda bilateral) el asunto de los tres periodistas cubanos que están presos», afirmó Trotti, quien apuntó que habrá un panel específico dedicado a la nueva etapa que se abre en la isla.Trotti, exjefe de redacción del diario argentino El Liberal, subrayó la importancia de esta Asamblea y la necesidad de realizar un alegato por la libertad de prensa, también en países como Venezuela y Ecuador.Preocupa especialmente a la SIP la «falta de transparencia y de acceso a la información pública», por un lado, y la «utilización de la publicidad oficial como arma para discriminar a medios que no se pliegan a los Gobiernos», por otro, hizo hincapié Trotti.En esta disección de los problemas que afrontan los periodistas en el ejercicio de la profesión, Trotti apuntó a la «concentración de medios» en manos del Estado como el «problema más grave en América Latina», al menos en cinco países.Así, en Ecuador «se han confiscado medios calificados de corruptos y prometido que, en el término de seis meses, se iban a poner a licitación pública». «Eso nunca ocurrió», denunció Trotti, para agregar que esos medios, ahora, «pertenecen al Gobierno ecuatoriano» y fueron convertidos en «agentes de propaganda».Similar situación se vive en Nicaragua, donde la familia del presidente, Daniel Ortega, «se ha apoderado de casi todos los medios», agregó.En cuanto a Argentina, recordó que el Gobierno «se está apoderando de los medios o trabajando (presuntamente) con testaferros».Aparte de los temas consustanciales con la libertad de prensa, la SIP profundiza, también en esta edición, en el mundo de la tecnología en los medios, la telefonía móvil y las nuevas audiencias digitales.La cita anual de la SIP, en la que participan más de 300 asistentes, del 2 al 6 de octubre, abordará también la dificultad de realizar un cubrimiento responsable en zonas de violencia, así como el creciente aporte de las mujeres en los medios. A ese debate contribuyen figuras destacadas del periodismo como Patricia Janiot, de CNN, y María Elvira Domínguez, del diario El País, de Cali.


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