La actriz mexicana Salma Hayek fue reconocida por su labor humanitaria en la séptima Bienal de Unicef Ball, celebrada el sábado en la noche en Beverly Hills, California.

La estrella de la cinta Frida fue honrada en la ceremonia con el Premio al Liderazgo Danny Kaye. En su participación recordó un viaje con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia hace una década a Sierra Leona, donde amamantó al hijo recién nacido de otra mujer.

Contó que una adolescente de 15 años de edad lloraba porque no podía alimentar a su recién nacido y ella se ofreció a hacerlo, pues acababa de quitarle la leche a su hija, publicó The Hollywood Reporter.

Sus acciones no se conocerían de inmediato porque su publicista insistió en que Unicef no publicara la foto. Sin embargo, tres años más tarde la mexicana permitió que la imagen fuera utilizada en una historia sobre la lactancia materna en África.

Hayek también recordó que aplicó vacunas contra el tétanos a niños en Sierra Leona durante el mismo viaje, después de que un recién nacido murió en sus brazos a causa del tétanos materno-neonatal.

En los años siguientes la actriz ha colaborado para eliminar ese tétanos en 44 países, según Unicef. También ha visitado a refugiados sirios en Líbano para apoyar programas educativos. “Se necesita muy poco para hacer cambios grandes, inmensos”, afirmó en la velada la artista, que ayudó a recaudar más de 700.000 dólares para los esfuerzos de ayuda después del terremoto en México en septiembre pasado.

En la ceremonia también se realizó una subasta en la que los presentes donaron sumas entre 1.000 y 32.143 dólares para financiar la organización. El acto concluyó con la interpretación de “Get Lucky” y “Happy” de Pharrell Williams.


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!