La policía de Perú desmanteló una red internacional de distribución de pornografía infantil con conexiones en al menos 30 países de cuatro continentes, según informó este viernes el Ministerio del Interior de ese país.
A través de un grupo de WhatsApp denominado Little Princess, que era administrado por un ciudadano colombiano cuyo nombre se mantiene en reserva, se compartían imágenes de niños, niñas y adolescentes siendo abusados sexualmente.
El grupo tenía 256 usuarios de América, Asia, África y Europa e incluía 48 usuarios de Brasil, 45 de México, 35 de Perú, 27 de Estados Unidos, 15 de Ecuador, 16 de Colombia, 13 de Argentina, 11 de Chile, ocho de Bolivia, cinco de El Salvador, tres de Uruguay, tres de Guatemala, dos de Paraguay, dos de Costa Rica, dos de Panamá, dos de Honduras y dos de Venezuela. También se detectaron usuarios en España, India, Alemania, Marruecos, Emiratos Árabes Unidos, Omán, el Reino Unido, Mozambique, Pakistán, Ucrania, Argelia, Túnez y Egipto.
En el caso peruano, la policía determinó que 17 usuarios del chat eran de Lima y 18 residían en otras regiones del país. Gracias a esa información, las autoridades capturaron a 33 de los 35 miembros peruanos acusados de integrar presuntamente la red. Y es que, según el ministro del Interior peruano, Mauro Medina, en el operativo “participaron 370 policías en coordinación con la División de Investigación de Delitos de Alta Tecnología de la Policía Nacional”.
Incluso, gracias a la coordinación con la Interpol y la Fiscalía de Cooperación Internacional, se realizaron detenciones en simultáneo de dos implicados en Paraguay y uno en Brasil.