A falta de menos de dos semanas para que inicie el Torneo Apertura, cada equipo alista sus piezas para disputar la primera jornada. Una de las divisas que trabajó durante más tiempo fue el Deportivo La Guaira, que comenzó su pretemporada el 12 de diciembre en la capital y entre el 6 y 16 de enero estuvo en Mérida, específicamente en el páramo La Culata

“Nos concentramos en Ecowild, un lugar especial que me dejó buenas impresiones. La cancha que tienen ahí es magnífica. El trabajo que realizamos fue excelente y podría ayudarnos a tener una buena campaña. La altura nos hizo bien aunque entrenar a más de dos mil metros cuesta más por los bajos niveles de oxígeno”, comentó el capitán del elenco naranja Vicente Suanno.

Pese al optimismo, la cautela es una de las premisas del plantel. “Disputamos tres amistosos y creo que jugamos bien. Sin embargo, eso no es indicativo de lo que haremos en el futuro porque el fútbol es difícil de predecir por la cantidad de variables que tiene”, acotó el volante de 35 años de edad.

La circunstancia por la que pasa el conjunto litoralense es distinta a la que vivió en el semestre anterior. Su actual entrenador, Pedro Depablos, llegó al club a cinco días del estreno del Clausura 2017. Y ahora, tuvo la posibilidad de empezar desde cero. “Lo siento mucho más cómodo porque inició la pretemporada con antelación. Tuvo mayor rango de tiempo para implementar lo que quiere como idea de juego”, señaló.

La juventud es una de las características de la nómina naranja. “Veo bien al grupo y es muy joven. Los mayores de 30 años somos solo cuatro futbolistas (César “Maestrico” González, Alan Liebeskind y Giovanny Romero). El resto del plantel está compuesto por menores de 27. Además hay mucho talento”, explicó.

Y la meta está muy clara. “El objetivo es volver a una copa internacional y en los dos últimos torneos no pudimos. Queremos emular lo que hicimos hace dos años, cuando llegamos a la tercera fase de Suramericana”, culminó.


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