Desde octubre de 2015, inició la lucha por obtener un boleto a Rusia 2018. El martes después de más de dos años de brega, se conoció el dueño de la última entrada disponible para la máxima cita. Perú derrotó 2-0 a Nueva Zelanda en Lima, en el compromiso de ida de uno de los repechajes internacionales, y estará nuevamente en un Mundial luego de 36 años de ausencia.

Con el ingreso del combinado inca al certamen, ya se conocen con precisión los integrantes de cada uno de los bombos del sorteo, que realizará el 1 de diciembre en el Palacio Estatal del Kremlin, en Moscú.

Con respecto a Brasil 2014, existe una diferencia importante. Para ese entonces, solo se usó el ranking FIFA para dictaminar los cabezas de serie y el resto de los bombos se compuso por la posición geográfica de las selecciones. Es decir; en el B estuvieron las africanas y suramericanas; en el C, asiáticas y centroamericanas y en el D, las europeas. Para esta edición, se utilizó la clasificación del ente rector para dictaminar donde se ubicarán los equipos y eso produjo que en cada llave se observen conjuntos de diferentes continentes del globo.

Los invitados a la fiesta. Como ya es usual, el anfitrión, en este caso Rusia, ocupa un puesto entre los cabezas de serie y lo acompañan cuatro campeones del mundo (Alemania, Argentina, Brasil y Francia), el vencedor de la última Eurocopa (Portugal) y dos combinados que han tenido un crecimiento notable en los últimos años (Polonia y Bélgica). Por diferentes motivos, los ojos del mundo estarán puestos sobre estos equipos. ¿Por qué? Aunque no todos parten como favoritos, tienen la presión sobre sus hombros de cumplir las expectativas de su entorno sobre la participación que tendrán en la justa. 

En el B, se visualizan tres escuadras que han levantado el trofeo (España, Uruguay e Inglaterra) y cinco cuadros de buen nivel competitivo (Suiza, Croacia, Perú, Colombia y México). ¿Un punto relevante? Todos llegan en un buen momento de forma y cualquiera de ellos tiene la capacidad de ser un dolor de cabeza para el contrincante que salga del A.

Tres escuadras del viejo continente (Dinamarca, Islandia y Suecia), una de Centroamérica (Costa Rica), tres de África (Túnez, Egipto y Senegal) y una de Asia (Irán) componen el C. Cabe recordar que daneses y suecos llegaron a la competencia a través de la repesca y lo hicieron afrontando el encuentro de vuelta fuera de casa, los primeros en Irlanda y los segundos en Italia.

Mientras que el D lo integran: Serbia, Nigeria, Australia, Japón, Marruecos, Panamá, Corea del Sur y Arabia Saudita. Pese a que pareciera que están relegados, pueden terminar siendo un incordio para sus rivales. Hay un ejemplo muy reciente: lo hecho por Costa Rica en Brasil 2014, cuando clasificó en un grupo donde estaban Uruguay, Inglaterra e Italia. Además llegaron a los cuartos de final, donde perdieron con Holanda en la tanda de penales.


Los que vuelven y debutantes

Un total de 20 selecciones que estuvieron en Brasil dirán presente en Rusia. Eso representa el 62.5% de las participantes y son 12 las que no participaron en el torneo efectuado en el país amazónico que accedieron a esta Copa del Mundo. Entre ellas están dos que llegaron por primera vez (Islandia y Panamá) y diez que vuelven (Perú, Egipto, Marruecos, Senegal, Dinamarca, Túnez, Suecia, Polonia, Serbia y Arabia Saudí).

Y cuatro equipos importantes que clasificaron a la edición anterior se quedaron fuera de la fiesta: Chile, Estados Unidos, Holanda e Italia. ¿Cuáles son los demás que no reeditaron? Argelia, Camerún, Costa de Marfil, Ecuador, Ghana, Honduras, Gracia y Bosnia-Herzegovina.


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