David Ospina, arquero colombiano del Nápoles, salió del hospital y se encuentra «bien», luego de desplomarse minutos después de recibir un golpe en la cabeza al chocar contra un jugador del Udinese, informó este lunes el jugador.
«Quiero agradecer de corazón a todas las personas que han estado pendientes de mi estado de salud. Me encuentro bien, en familia y en reposo y pronto con la ayuda de Dios y sus oraciones estaré de vuelta y más fuerte que nunca», escribió el guardameta en Twitter.
El portero de la selección cafetera acompañó el escrito con una fotografía en la que se ve sonriendo junto com sus dos hijos, mientras está acostado y con una curación en su frente.
Jesy Sterling, su esposa, había informado que Ospina está «muchísimo mejor». «Viví momentos de demasiada angustia y desesperación», afirmó la mujer en Instagram.
Ospina, de 30 años de edad, se lesionó al minuto 10 luego de chocar con Ignacio Pussetto en la victoria por 4-2 del Nápoles. Recibió atención médica y continuó jugando con una venda que le cubría toda la cabeza. Al minuto 41 se desplomó a la entrada del área y rápidamente recibió atención. La televisión Sky mostró imágenes del médico tomando la lengua del jugador, que había perdido el conocimiento.
Nápoles afirmó el domingo que el guardameta «tuvo una crisis hipotensiva por un golpe (…) con pérdida de sangre, pero sin perder el conocimiento».
«Más o menos puede estar de ocho a diez días de incapacidad, aunque no hay ninguna información oficial», aseguró su padre, Hernán Ospina, a medios radiales.
Por la lesión, el internacional fue desafectado de la convocatoria en la que se estrenará Carlos Queiroz como técnico de Colombia, en los amistosos contra Japón y Corea del Sur el 22 de marzo en Yokohama y 26 en Seúl. Su puesto será disputado por Camilo Vargas (Deportivo Cali), Iván Arboleda (Banfield, Argentina) y Álvaro Montero (Deportes Tolima).