Si así llueve que no escampe. La goleada propinada a Vanuatu por parte de Venezuela, ayer en Daejeon, se asemejó al torrencial aguacero que cayó sobre Caracas al mismo momento que se disputó el compromiso. Esta victoria le concedió a la Vinotinto el pasaje a octavos de final y le permite al país, que pasa por momentos difíciles, seguir soñando.

El resultado frente a los teutones causó una euforia enorme y podía suceder que se subestimara al combinado oceánico. Sin embargo, no fue así. “Después de ganarle a Alemania, la emoción te puede jugar una mala pasada y no podía permitir que mis jugadores creyeran que el partido contra Vanuatu ya estaba ganado antes de jugarlo”, comentó Rafael Dudamel en la rueda de prensa posterior al encuentro.

“El triunfo de hoy es producto del respeto, humildad, la grandeza que han tenido mis jugadores para enfrentar a un digno rival; mi equipo ha dado una demostración de madurez, ambición y sobre todo, de enfoque”, agregó.

Primer tiempo trabado. El entrenador hizo una sola variante con respecto al primer compromiso. Colocó a Ronaldo Chacón en lugar de Yefferson Soteldo y modificó el esquema del 4-2-3-1 al 4-4-2. Mientras que el serbio Dejan Glusevic paró cinco en el fondo y logró complicar al combinado patrio en los primeros pasajes del encuentro.

El juego asociado no apareció y no había alguien que diera la pausa necesaria para llegar con claridad al área rival. Cuando eso pasa, la pelota parada es un recurso muy útil y de esa manera se anotaron los dos primeros goles. En un tiro libre indirecto desde la izquierda, Ronaldo Lucena se la cedió a Peñaranda, quien efectuó un centro al segundo palo y Williams Velásquez llegó para rematar de cabeza, cuando el cronómetro pisaba la primera media hora.

El segundo tanto, hecho por Sergio Córdova a los 42’, se determinó por el VAR (sistema de vídeo-arbitraje). Tras la revisión del cuarto árbitro en la jugada, concluyó que no había fuera de juego del caraqueño en un saque de esquina.

Vendaval de dianas. Como si fuese un chaparrón de agua, se completó la goleada. Apenas el principal dio inicio al complemento, Peñaranda hizo el tercero luego de definir en un mano a mano con el arquero y los rivales recibieron un duro mazazo. El cuarto lo anotó Fariñez desde los doce pasos.

Córdova marcó su segundo y el quinto de Venezuela luego de ser asistido por Ronaldo Lucena con un centro al área. El sexto fue una obra sublime de Soteldo, quien se escapó por la izquierda y le dio un pase a Jan Hurtado para que definiera con el arco vacío y Samuel Sosa hizo el séptimo al rematar un centro de Eduin Quero.


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!