Tras cuatro años de espera, una nueva edición de la Copa del Mundo se inauguró en el estadio Luzhnikí, Rusia, en medio de una ceremonia llena de colores para dar entrada a las 32 selecciones que buscan el trono de Moscú.
Con la figura de Ronaldo como maestro de ceremonias, el ex futbolista brasileño dio entrada al artista británico Robbie Williams, quien animó a los presentes con dos de sus hits más importantes, “Feel” y “Angels”, que hicieron ponerse de pie al público en las gradas. Además, cantó junto con la soprano rusa Aida Garifullina con su interpretación de ópera.
Asimismo, el violinista Yuri Bashmet, ganador del Grammy en 2007, y el pianista Danil Triifonov, que se llevó el mismo galardón pero en 2017, fueron invitados al magno evento.
Mucho se dijo que el acto inaugural, a diferencia de otras ceremonias de inauguración del Mundial, esta estaría centrada en los actos musicales, por lo que fue algo más breve para dar inicio al gran evento del fútbol.
Minutos antes, el ex portero de la selección española, Iker Casillas, y la modelo rusa Natalia Vodianova presentaron el trofeo de la Copa Mundial.
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