Más de un centenar de personas rezó y cantó este miércoles durante la vigilia en honor de la cantante Aretha Franklin, quien se encuentra en un estado grave de salud.

La vigilia se realizó en la iglesia bautista de New Bethel en la ciudad de Detroit, Estados Unidos, donde su padre fue pastor durante más de 30 años.

Como cualquier otro miércoles, el servicio religioso comenzó a las 5:00 a.m pero esta vez los 10 o 12 feligreses que suelen acudir al templo se convirtieron en más de un centenar, dispuestos a honrar a la «Reina del Soul», informó el periódico Detroit News.

El padre de la artista, el reverendo Clarence LaVaughn Franklin, conocido como el «hombre de la voz del millón de dólares», fue pastor de esa iglesia entre 1946 y 1979, hasta su muerte.

Cuando el padre de Franklin era pastor, el templo pasó a ser conocido por su coro de góspel, sus retransmisiones de radio y sus reivindicaciones en el seno del movimiento por los derechos civiles de los negros.

En el servicio, Robert Smith, pastor de New Bethel durante 36 años, elogió a Aretha Franklin por su «continua generosidad» con la iglesia donde creció.

Uno de los ayudantes de Franklin, Fannie L. Tyler, recordó sus continuas donaciones al templo y cómo pagó por los funerales de artistas que habían trabajado con la discográfica Motown Records, fundada en Detroit y dedicada a la música negra.

La vigilia estuvo dedicada a honrar a la legendaria artista y a pedir un poco de «Respect», la canción que Franklin convirtió en un himno, que reclamaba mayor respeto para las mujeres en la ebullición de los años 60 y 70.

Nacida en 1942 en Memphis, Tennessee, y criada en Detroit, Michigan, Franklin se convirtió en un icono del soul a mediados de la década de los años 60 y usó su influencia para impulsar los derechos civiles de los afroamericanos y la liberación de la mujer.


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