El ministro de Comunicación y psiquiatra oficial, Jorge Rodríguez, anunció que hoy arrancaría el Censo Nacional del Transporte a través del portal www.patria.org.ve. Tratando de engolar su voz, que no es la de un barítono sino que se acerca al aullido de un coyote herido, le explicó a los venezolanos que se trataba de “un poderoso mecanismo de subsidio directo” (¿?), para lo cual están solicitando a todo el que tenga un vehículo que rellene los datos en patria.org.ve., “para tener un registro completo, total y actualizado del parque automotor, transporte público y privado”.
Agregó el ministro Rodríguez que desde el próximo 20 de agosto se iniciará un extraordinario plan “para la protección de la gran mayoría del pueblo”. Pero ¿de qué se trata, señor ministro?, se preguntan los ciudadanos. ¿Por qué darle tantas vueltas al asunto sin precisar nada?
Al final el señor Rodríguez soltó esta prenda: “Es una verdadera revolución hacia un poderoso mecanismo de subsidio directo a todo el pueblo de Venezuela que tenga la propiedad de un vehículo”. ¿Qué tipo de vehículo? ¿Terrestre, aéreo? ¿Para transporte familiar, militar, escolar, mercancías secas, de pasajeros en rutas urbanas, animales vivos, pollos muertos, turistas, militantes del partido PSUV, médicos cubanos? El ministro no aclaró y mejor que no aclare porque enreda.
¿Y por qué luce tan enredado? Pues por una sola razón: porque nadie se explica este censo si ya existe esa información minuciosamente recogida año tras año en los diversos departamentos oficiales. Quien tiene un vehículo que funciona a base de gasolina, gas o diesel, ya ha registrado la posesión de dicha máquina al adquirirla de una agencia autorizada que, entre otras cosas, debe entregar al comprador los papeles debidamente impresos, con una copia adicional.
En las dos copias está claramente determinado el nombre del vendedor y de quien adquiere el vehículo en cuestión, así como las características del tipo, color y capacidad de pasajeros. Adicionalmente, se anexan los seriales de la carrocería y del motor que son impresos en el vehículo desde su fabricación, y la placa que lo identifica ante las autoridades del tránsito para que pueda transitar legalmente por calles y carreteras, así como también en caso de un accidente vial.
Por si fuera poco, señor Jorge Rodríguez, las autoridades expiden un pequeño documento que, luego de ser plastificado, debe ser portado por el conductor o el dueño del vehículo. Si así no lo hiciera será objeto de una multa por infracción a las leyes del tránsito. Lo más extraño del asunto es que en dicho pequeño documento consta el año de fabricación, la marca, el color, el tipo (sedán, deportivo, carga), si es para uso particular, el nombre del propietario y los seriales. Este carnet se le conoce como “certificado de circulación” y es expedido por el Instituto Nacional de Transporte Terrestre.
Usted, señor ministro, está mintiendo sobre el verdadero propósito del censo que hoy está implementando el gobierno de Nicolás Maduro. No es precisamente para beneficiar a los conductores sino para imponer un racionamiento de combustible y un control más estricto sobre el desplazamiento de los venezolanos. No se trata de ningún avance sino de un retroceso. Sea sincero.