?Yo tenía la meta de construir 4 millones de viviendas, pero ahora no sé. Te pedí el apoyo y no me lo diste?, dijo el presidente Nicolás Maduro el lunes en su programa televisivo. ?Con esos 112 (diputados) me pueden negar todos los recursos. Hoy están en la picota todos los planes sociales?, afirmó.Pero no ha sido solo el primer mandatario el que ha reprochado a los venezolanos los resultados del 6 de diciembre, ministros y demás funcionarios han cuestionado a los trabajadores por no haber retribuido con sus votos los ?regalos? que recibieron del gobierno en vísperas de los comicios legislativos.Dirigentes sindicales denunciaron que los trabajadores públicos ?han sido agredidos verbalmente, amenazados y humillados?, tras el triunfo de la oposición en las parlamentarias.El coordinador Nacional de la Unión de Trabajadores, Servando Carbone, informó que el ministro de Alimentación, Carlos Osorio, se reunió con los trabajadores del despacho y ?los humilló y agredió verbalmente tildándolos de malagradecidos?. Carbone añadió que el funcionario le echó en cara a los empleados que les dio ?bolsas de comida regaladas? y facilidades para obtener productos regulados antes de las elecciones, y les advirtió que de ahora en adelante ?se las tendrán que ir a pedir a la oposición?.El dirigente aseguró que en la Comisión Nacional de Telecomunicaciones vivieron una situación similar. Los trabajadores fueron amenazados con que les quitarán el ?bono hallaquero? por haber ?traicionado la revolución?.Alertó a los empleados del Estado que los derechos laborales y beneficios contractuales son reivindicaciones ya ganadas, no son los ministros quienes las otorgan a su antojo. ?En poco tiempo vendrá al país la comisión de la Organización Internacional del Trabajo y podrá observar el comportamiento del gobierno, intimidaciones y agresiones a los trabajadores ?Se les caerá la máscara?, expresó.Hostigamiento. Rodrigo Penso,  coordinador nacional del Frente Autónomo en Defensa del Empleo, el Salario y el Sindicato, rechazó el mensaje colocado en las pantallas de las computadoras de los trabajadores de Pequiven, Pdvsa y otros organismos gubernamentales que decía ?Cuando al malagradecido se le olvida quién lo ayudó, la miseria le refresca la memoria?.Dijo que los empleados perdieron el miedo a manifestar su rechazo hacia las políticas del gobierno y a las condiciones de precariedad a las que son sometidos por la falta de alimentos, medicamentos y la inseguridad.Marlene  Sifonte, secretaria general del Sindicato Unitario Nacional de Empleados Públicos del Instituto Nacional de Parques, agregó que los obreros y contratados están siendo amenazados con ser despedidos, en particular 100 de los trabajadores del Parque del Este. La dirigente afirmó que los trabajadores son ahora más vulnerables a ser despedidos.


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