Las declaraciones del presidente Nicolás Maduro el sábado en Cabimas, Zulia, en las que responsabiliza a directivos de la empresa Energía Eléctrica de Venezuela de la mala calidad del servicio de electricidad, no tienen ninguna base, afirmaron fuentes sindicales del sector que pidieron no mencionar sus nombres.
“Maduro desconoce el deplorable estado del sector eléctrico en Zulia como consecuencia de la falta de mantenimiento a las instalaciones”, dijo un sindicalista e insistió en que el discurso del mandatario es electorero y “pretende tapar la situación desesperada que viven los zulianos sometidos a racionamientos de más de 15 horas diarias”.
Otro dirigente recordó que antes de su absorción por la Corporación Eléctrica Nacional, Enelven, regida por el Fondo de Inversiones de Venezuela, se caracterizó por prestar un servicio de calidad, hacer inversiones y programas de mantenimiento, y presentar óptimos resultados operativos y financieros.
“Es injusto echarle la culpa a directivos de Enelven, amenazándolos con la cárcel, del desastre del sector eléctrico zuliano ocasionado por Corpoelec”, reiteró la fuente. Agregó que “Maduro busca captar el voto de los zulianos, molestos porque no tienen luz”.
Los sindicatos han advertido que Corpoelec no ha hecho mantenimiento durante años, lo cual ha facilitado que el salitre haga estragos en las instalaciones eléctricas.
En diciembre de 2017 se fue la luz por el colapso del cable sumergido en el lago. Desde marzo pasado los zulianos padecen tres y cuatro de racionamientos diarios de tres y cinco horas de duración porque las unidades de las plantas de generación (Rafael Urdaneta, Ramón Laguna y Termozulia) están paradas o funcionan al mínimo de su capacidad.
Igualmente, la energía de la central hidroeléctrica Guri (Bolívar) tiene problemas para llegar al Zulia por las malas condiciones de las líneas de transmisión debido a la corrosión.
Un informe del Grupo Ricardo Zuloaga señala: “La crisis eléctrica que afecta cada día, con mayor fuerza, a los venezolanos debido al deterioro progresivo y acelerado de todas las actividades destinadas a la prestación del servicio, es más notoria en Zulia”.
Agrega que los racionamientos sistemáticos deterioran la calidad de vida de los zulianos y no se ve una solución a corto plazo. “La condición del sistema eléctrico de la Costa Occidental del Lago es muy precaria y va en camino de convertirse en caótica”, dice el texto.
Apunta que de 2.000 megavatios instalados de generación propia solo funcionan 600 y la diferencia para satisfacer el consumo actual (1.700 megavatios) debe traerse a través de 5 líneas del sistema interconectado nacional. De ellas, 3 líneas de 230 kilovatios están averiadas e indisponibles,
Las otras 2 líneas aéreas de 400 KV llegan a la Subestación Cuatricentenario y pueden aportar 900 megavatios. Ese volumen más la generación propia disponible (600) no cubre la demanda zuliana y deja un déficit de electricidad de 200 megavatios o más, lo cual origina racionamientos y bajones de voltaje.
“Existe la amenaza del colapso en las líneas de 400 kilovatios, que cruzan el lago, pues por la corrosión que presentan varias torres pueden sucumbir”, añade el informe.
La situación fue comprobada por expertos de la Universidad del Zulia y del Colegio de Ingenieros del estado. Anota que de colapsar alguna de las torres no habría manera de importar suficiente energía del sistema interconectado nacional y solo quedaría disponible la generación propia, que apenas cubre 30% del requerimiento zuliano.