La Confederación de Industriales de Venezuela reiteró su rechazo a la Asamblea Nacional Constituyente convocada por el presidente Nicolás Maduro, y exigió que se abran los mecanismos para la celebración inmediata de elecciones generales, como una de las salidas para solventar la crisis política y económica.

«Como empresarios, pero sobre todo como ciudadanos, exigimos que se abran los mecanismos para la celebración inmediata de elecciones para los cargos de: presidente de la República, gobernadores, alcaldes, Asamblea Nacional y que éstos, a su vez, procedan a la designación de nuevos funcionarios públicos para el Tribunal Supremo de Justicia, Consejo Nacional Electoral, Defensoría del Pueblo, Fiscalía General, Contraloría Nacional y Banco Central de Venezuela», afirmó Conindustria en un comunicado.

El gremio insistió en que la caída en la producción, que ha generado escasez y desabastecimiento, es propiciada por las políticas del gobierno. «Este modelo económico fracasado ­caracterizado por controles de precios y de cambio, expropiaciones y confiscaciones de empresas, así como fiscalizaciones excesivas- provocó una caída de 32% de la producción industrial entre 2012 y 2016».

Agregó que la aplicación del modelo también provocó el cierre de 8.000 compañías en los últimos años. Mientras en 2008 existían 12.000 empresas, en la actualidad hay apenas 4.000.

«El resultado del deterioro de la industria, tanto la privada como la del Estado (incluyendo la petrolera), se tradujo no sólo en menos producción de bienes, sino también en pérdida de empleos de calidad, y empobrecimiento general de la población, al punto que hoy en día hay ciudadanos que solo comen una vez al día».

Cumplir la Constitución.
Conindustria aseguró que la crisis del país también ha sido provocada por el desconocimiento de los principios establecidos en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.

Exigen al gobierno que cumpla cabalmente con lo establecido en la Carta Magna y no intente reemplazarla.

«La sola e innecesaria discusión pública de una Asamblea Nacional Constituyente desvía el foco de los problemas reales que enfrenta el país, que son la falta de producción, la inseguridad y jurídica, así como la obstrucción de los mecanismos para la sustitución de los funcionarios públicos y la vigencia plena de la democracia».

El gremio aplaudió la manifestación pública de la Fiscalía General de la República en rechazo a la celebración de la Asamblea Nacional Constituyente, y condenó la represión salvaje de la Guardia Nacional Bolivariana y la Policía Nacional Bolivariana, en contra de los manifestantes.

«El país necesita con urgencia un cambio. Se requiere regresar a la institucionalidad, al respeto pleno de la libertad de expresión, económica y libre iniciativa privada».


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