El negrito, con leche o marrón en la mañana o después de las comidas es indispensable para algunos consumidores. Afirmaron que aunque aumente el precio no dejarán de ?darse el gusto?. Si bien la Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos subió el producto de 46,6 bolívares el kilo a 694,21, aseguraron que ?están ganando? porque ese precio está por debajo de los 2.500 bolívares que pagan por kilo cuando lo consiguen. ?A precio regulado nunca hay?, indicó Mary Salazar en un supermercado ubicado en Macaracuay. Los compradores expresaron que aprueban el alza del precio del kilo de café siempre y cuando esto implique que el producto estará disponible en los anaqueles. Mirian Inchausti, ama de casa, relató que en casi tres meses que van del año solo una vez ha conseguido café Fama de América y únicamente le vendieron dos cuartos de kilo. ?El café que se ve es el gourmet que cuesta 1.250 el medio kilo o el artesanal a 1.800 bolívares?, dijo. Agregó que el problema es que el gobierno se apropió de las fábricas de café y acabaron con ellas. ?No hay producción?, expresó. Yamilet Indriago agregó: ?Lo que queda es tomar guayoyo en casa para rendirlo?. Gabriel Moreno, ingeniero, dijo que él se toma su café ?bien resuelto en casa antes de salir en la mañana? y que redujo el consumo en la calle debido al alza. Agregó que un café grande le cuesta 200 bolívares y se tomaba dos cada día de la semana lo que implicaba un gasto de 2.000 a la semana. ?Sin darme cuenta se me iban 8.000 bolívares al mes en café. Ahora me tomo uno pequeño al día, porque no puedo prescindir de él?. ?No funciono sin cafeína, me duele la cabeza. Pagaré lo que cueste?, indicó Georgina Palacios, abogada. En algunas cafeterías y panaderías ubicadas en Los Ruices, Los Cortijos, Macaracuay y Chuao los precios del café pequeño y grande se mantuvieron igual ayer: entre 100 y 130 bolívares el pequeño y de 200 a 270 el grande. El encargado de una panadería ubicada en Los Ruices indicó que todavía tiene inventario de café en grano y que el último kilo que compró lo pagó a 3.500 bolívares. La propietaria de una cafetería situada en Macaracuay dijo: ?Ajustaremos el precio de acuerdo con el incremento que nos haga el proveedor?. Agregó que cada vez hay menos oferta de café, debido al cierre de las industrias nacionales y a la merma en la producción de las que siguen operativas. Merma productiva. Entre febrero y marzo dos torrefactoras estatales detuvieron las operaciones. Café Venezuela se declaró en cierre técnico por no contar con los insumos necesarios y, a comienzos de este mes, trabajadores de Café Madrid denunciaron la paralización de la producción por falta de materia prima. Café Madrid que pertenece a la Empresa Nacional del Café. Nació en 1958 y en años anteriores tenía capacidad para fabricar 2 millones de kilos, dijeron sus trabajadores. El sector cafetalero alertó que la producción nacional generaría en febrero 400.000 quintales del grano con lo cual podría satisfacerse apenas 17% de la demanda nacional que se ubica en 2,4 millones de quintales, según fuentes oficiales. Explicaron que la producción ha caído vertiginosamente porque los precios del rubro no generan rentabilidad para cubrir los costos. A esto se añade que los caficultores están cultivando de la misma forma en la que se hacía 100 años atrás, con maquinarias obsoletas y sin actualizar los procesos de siembra y cultivo.


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!