Los Juegos Suramericanos de Cochabamba bajaron el telón ayer, con Colombia como campeón por segunda vez en su historia (tras Medellín 2010), Brasil como escolta y Venezuela en el tercer lugar.

Colombia, que en cada competencia ratifica el crecimiento de su deporte, derrotó a los brasileños por cuatro medallas de oro (94-90). Los cafeteros ganaron 42 doradas más que en Santiago 2014. La delegación vinotinto recuperó el tercer lugar que había perdido en la edición anterior, aunque comenzó la semana en el quinto escaño.

Venezuela, que llevó selecciones renovadas en natación y boxeo, cosechó 157 metales, 43 de ellos dorados, 59 de plata y 55 de bronce. Los deportes de combate apuntalaron su actuación. Hace 4 años el botín fue de 150 (47 oro, 40 plata, 63 bronce).

La dirigencia deportiva calificó esta posición como un éxito. Los pronósticos apuntaban a pelear por estar entre los cuatro mejores. Sin embargo, la delegación nunca estuvo cerca de la pugna por los dos primeros puestos.

Argentina cerró cuarta con 4 oros menos que en 2014 (41, 59, 63) y Chile sorprendió con su quinto lugar (38, 34, 60).

La última medalla de oro venezolana fue para Lucirio Antonio Garrido, vencedor en 800 planos con 1.51.15 minutos.

“La base de altura que hicimos y los consejos de mi papá fueron muy importantes”, dijo Garrido. “Estamos trabajando muy fuerte en los últimos meses. Estoy seguro de que mi papá que es mi entrenador, estará muy orgulloso de mi triunfo acá en Bolivia”.

El atletismo vinotinto cerró con seis doradas, igual cantidad que obtuvo la lucha para erigirse como las disciplinas más productivas en Cochabamba.


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!