Mucho se ha hablado entorno a lo que puede ser la campaña del estelar venezolano Miguel Cabrera luego de un 2017 para el olvido.
El maracayero trabajó durante el receso entre temporadas en la búsqueda de recuperar su mejor forma para acallar los comentarios de que su baja producción se debe a la decadencia de su estado físico y a la perdida de cualidades en el home plate.
Libre de dolencias físicas Miggy hizo una buena pretemporada y en las primeras de cambio en este 2018 ha exhibido que, si bien no está en su nivel más óptimo, va camino a logarlo y ayer dio una pequeña muestra, en el juego en el que los Tigres de Detroit batieron 13 a 8 a los Orioles de Baltimore.
Cabrera aportó tres hits en cinco turnos y elevó a .283 su promedio ofensivo. Es la segunda vez en la incipiente campaña en la que el primera base de los bengalíes suma trío de imparables en un encuentro, después de que lo hizo el 1 de abril, en el segundo juego de una doble cartelera frente a los Piratas de Pittsburgh, con diferencia que en esa ocasión se presentó solo cuatro veces en el cajón de los bateadores.
El toletero, que el miércoles cumplió 35 años de edad, suma cinco inatrapables en sus últimos nueve turnos, incluidos un vuelacercas y dos dobles. Aunque solo ha podido remolcar una rayita.
El auge de su bateo coincide con el buen momento de los bengalíes, que con el lauro de ayer llegaron a tres de manera consecutiva para recuperar terreno en la División Central de la Liga Americana, en la que marchan terceros con récord de 7-9, a solos dos juegos y medio por detrás de los líderes, los Mellizos de Minnesota.
Victor Martínez también tuvo su contribución en la conquista rayada al irse de 5-2, con su quinto doblete del año y fletar una anotación. Dixon Machado también llevó a un compañero hasta el plato y anotó un par de veces.
Por los Orioles, Luis Sardiñas falló las cuatro veces que compareció ante los lanzadores de Detroit, mientras que el novato Anthony Santander disparó un sencillo, también en cuatro turnos.
En la oficina. José Altuve tuvo ayer otra jornada de esas a la que ya ha acostumbrado al público y se erigió como la gran figura del triunfo de los Astros de Houston 9-2 frente a los Marineros de Seattle. El actual Jugador Más Valioso de las Grandes Ligas terminó el desafío de 4-3, con par de dobles, un sencillo y cuatro carreras remolcadas. Elevó su average a .342.