Cuatro etapas de montaña figuran en la parte final del menú de la edición 100ª del Giro de Italia, que finalizará el próximo domingo en Milán con un contrarreloj individual (29,3 km).

Nairo Quintana (Movistar), segundo en el Giro de Italia, mostró en Bérgamo, en la última jornada de descanso de la prueba, su confianza en que la semana final del Giro sea buena para sus intereses.

“Es verdad que normalmente estoy muy bien en la tercera semana. Espero que la caída no me lastre porque estaba en un gran estado físico. En teoría, se me tiene que dar bien esta tercera semana”, dijo Quintana en rueda de prensa.

El colombiano se cayó en un descenso a 37 kilómetros de la meta, pero pudo continuar inmediatamente con la bicicleta de un compañero, para luego seguir con la suya. “Estoy un poco peor que antes de caerme”, bromeó, “pero en realidad estoy mejor de lo que podía estar por la caída. Solo fue un susto y tengo un par de golpes, pero creo que no va a afectar mi rendimiento”, continuó. Finalmente entró en segunda posición tras el luxemburgués Bob Jungels, por lo que logró seis segundos de bonificación, reduciendo su desventaja con el líder Tom Dumoulin.


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