Mejores tiempos. Dentro de dos días, es decir, el martes 27 de febrero, Venevisión cumplirá 57 años de transmisiones ininterrumpidas. El canal más antiguo de la industria televisiva venezolana –título que heredó tras el cierre de RCTV en 2010– llega a su aniversario con los achaques derivados de una crisis nacional sin precedentes, que abarca tanto sus operaciones como su oferta programática.
Hace un par de semanas, el sindicato de trabajadores de Venevisión hizo llegar un escrito al portal Aporrea en el que denunciaba que de 4.000 empleados, la nómina había descendido a 780 y que esperaban un nuevo recorte de 300 más. Además del incumplimiento de una serie de beneficios contractuales que han generalizado el descontento dentro de las instalaciones del canal.
Ese descontento también alcanza al talento artístico. En días recientes se conoció que la animadora Mariángel Ruiz cambió de estatus dentro de la empresa, al no ver satisfechas sus aspiraciones salariales. De estar en la nómina pasó a contratada para cumplir puntualmente con Cartas del corazón y Miss Venezuela.
De esta forma, la televisora solo se queda con una figura de sólida trayectoria en los medios audiovisuales: Mariela Celis, mientras la supervivencia está relacionada con la apuesta a jóvenes en formación que aprecian la oportunidad de estar en pantalla.
En este grupo destacan Henrys Silva y Dave Capella, quienes cuentan con las herramientas para hacer carreras a largo plazo, porque tienen inquietudes que trascienden el posteo de fotografías en las redes sociales. Sin embargo, les falta camino por recorrer.
Dentro del cuadro de preocupante trazo es vital lo que sucederá con la Organización Miss Venezuela. A 19 días de haberse anunciado la renuncia de Osmel Sousa, todavía no hay información oficial de quién será el encargado de colocarse al frente del sexagenario concurso de belleza. La gallinita de los huevos de oro del canal, que anualmente reunía entre 30 y 40 anunciantes, yace en una nebulosa que algunos agoreros señalan como el presagio de su desaparición.
Ojalá dentro del futuro anhelado resurja Venevisión cual ave fénix, por el bien de la industria y, sobre todo, por el bien del público. Aunque los tiempos de Lupita Ferrer y José Bardina, Joselo, Hilda Carrero y Eduardo Serrano, Gonzalo López Silvero, Carmen Victoria Pérez y Gilberto Correa, Alba Roversi y Guillermo Dávila, no volverán, hay que escribir nuevos capítulos en tiempos de globalización, para que los próximos cumpleaños sean felices.