A cada instante y en toda oportunidad es nuestro deber recalcar e insistir en que la institución universitaria se constituye en el pilar esencial de progreso para los países, dada su misión rectora de gestionar procesos continuos de enseñanza-aprendizaje, generadores de talento humano, capacidad innovadora y de bienes de capital tecnológico.
Consiguientemente, el conjunto de adversidades complejas de carácter humanitario que padece la totalidad de la sociedad venezolana continuará en su tendencia negativa mientras se mantenga la tesis gubernamental de afincarse en la promoción e implementación del “petro”, pero sin la innovación real, efectiva y permanente, lo cual se traduce en un alejamiento sostenido del verdadero desarrollo humano: “petro” sin innovación = ausencia de desarrollo humano.
Se comparte con todos los distinguidos lectores un análisis que responde en parte a la interrogante que se nos formuló en días anteriores: “Innovación y tecnología en los países del primer mundo: aspectos comparativos con respecto a Venezuela”. El mismo está disponible en la siguiente dirección: https://bit.ly/2UOC0Sh
Pensamiento final: dejar que la energía fluya es en esencia el principio divino que se encuentra omnipresente en todas las situaciones, vivencias y experiencias de los seres vivos. Por tanto, que siga fluyendo la energía entre nosotros y en todo lo que hacemos, viviendo en Dios y por ende en el amor. Mis mejores deseos de salud y armonía.