Atravieso desde mi inmortalidad los barrotes de esa imagen que me aprisiona en La Carraca en supuesta postración, cuando en realidad pensaba mi plan de escape a la libertad. Deseaba acudir a esas fronteras de la Gran Colombia de mis sueños, para comandarte nuevamente. ¡Por eso hoy te hablo desde mis realizaciones históricas, del honor y del verdadero amor a la patria. Esa Colombia que forjé en mi mente como precursor de la unión de todos los pueblos americanos!
Te hablo desde mi grado de comandante que se me confirió por mis luchas en Pensacola, a favor de la revolución independentista de los Estados Unidos de América. Te hablo desde mi grado de general del Ejercito de Francia, por mis batallas por su revolución de liberación, para la libertad, la Igualdad y la fraternidad. Te hablo como Generalísimo de nuestro verdadero ejército, el que se origina desde nuestra revolución de independencia venezolana. Te hablo desde nuestro “Ejército forjador de libertades”. Ese que al decidir mi capitulación sabía salvaba inequívocamente junto a la vida de mis jóvenes oficiales, para luego conducidos por esos, mis discípulos, convirtieran en realidad la independencia de nuestra región.
¡Soldado! es el tiempo de salvar, con visión correcta, esta hora final donde debemos acudir a las raíces que como ideólogo sembré para ti en momentos cruciales como éste. Tu toma de decisiones hoy es crucial para más allá de los próximos doscientos años. Ejércitos de pueblos hermanos nos apoyan, como lo logré ayer, para liberarnos como patria de la plaga de la perversión de nuestras costumbres, sentimientos familiares y pensamientos autóctonamente libertarios. Bajo la ideología comunista, llena de errores y mentiras condimentadas con la manipulación de los símbolos que cree para ti, y con los cuales estoy nuevamente hoy a tu lado. Soldado, debes enfrentar con aplomo y coraje este torbellino de realidades que nuestra libertaria nación venezolana te exige, y es hoy 23 de febrero de 2019, prueba vibrante en las calles de todo nuestro territorio de la impostergable necesidad del cambio.
Asume soldado venezolano tu lucha libertadora de hoy por nuestro país, y por nuestro sub continente Latinoamericano. Enarbola junto a tus compañeros esa mi bandera tricolor cuando en 1806 invadí nuestras costas para liberarla. Nuestra bandera de colores primarios amarillo azul y rojo, son símbolo de libertad y orgullo para Colombia. Los hombres que directamente comandas, únelos a tu pueblo en esta cruzada histórica de redención de los daños que como hombre de uniforme, has sido conducido a infringir a tus propias hermanas y hermanos venezolanos.
Durante toda la historia de mi carrera militar jamás vi tal cobardía contra un combatiente intentando rendirse, como la ejecutada en la masacre contra un venezolano de honor como lo fue Oscar Pérez. Este, para no hacer daños irreparables a sus semejantes, blandió en un aparato volador sobre mi ciudad natal Caracas, una pancarta con un artículo de la Constitución, el 350, para llamar a tu rebelión pacífica y consecuente con la libertad de Venezuela.
Hoy, después de esta reflexión final, te ordeno que siguiendo los preceptos por los cuales hemos luchado y nos identifican como militares venezolanos asumas: a) la auténtica defensa de nuestro pueblo, para que así reciba el auxilio humanitario indispensable que se requiere con urgencia, b) Que asumas el control de tus cuarteles y esperes instrucciones del presidente constitucional legítimamente encargado de Venezuela, Juan Guaidó c) Que te sumes a la Operación Internacional por la Libertad “Francisco de Miranda” acompañando el tránsito de los insumos médicos y los alimentos que se distribuirán entre nuestras hermanas y hermanos.
Este día 23 de febrero de 2019 se iniciará, con esta nueva etapa de renacimiento de nuestra Venezuela y de su democracia, un nuevo canal de televisión, desde acá desde el estado de Florida donde recibí mis preseas de comandante militar y desde la Universidad Internacional de la Florida con la Cátedra Internacional por la Libertad que lleva mi nombre “Francisco de Miranda” será canal para la promoción de la libertad, la justicia, la unión y el progreso de nuestras naciones, y para el fortalecimiento de nuestras relaciones internacionales con el mundo.
¡Dios nos acompañe en esta hora de desafíos que afrontar en el camino de reconstrucción de Venezuela, y para dar nuestro aporte en la construcción un mundo mejor para la generaciones que nos seguirán sucediendo!