Primera:
¿Sabía usted que las sociedades se están transformando al punto de desafiar a los gobiernos sobre las visiones existentes de cara al futuro? Si lo sabe ¿por qué no deja que la sociedad joven e inteligente imponga su visión de país?
Segunda:
¿Sabía usted que la globalización y la tecnología se han acelerado? Si lo sabe, ¿qué ha hecho usted y qué va a hacer para evitar el rezago tecnológico que hoy existe en el sistema económico, productivo y científico nacional?
Tercera:
¿Sabía usted que enfrentar la desigualdad y la exclusión social hoy más que nunca depende de cómo los gobiernos utilizan la tecnología para reducirla? Si lo sabe, ¿por qué insiste en atacar la desigualdad y la exclusión social con más rentismo y más populismo?
Cuarta:
¿Sabía usted que el potencial de los gobiernos para crear bienestar está en la ejecución de nuevos enfoques sobre la economía y la política y de su relación con la innovación? Si lo sabe, ¿por qué ha gobernado e insiste en seguir gobernando con enfoques gastados y fracasados?
Quinta:
¿Sabía usted que los desarrollos globales y las tendencias futuras de convivencia humana solo son posibles con la utilización de la ciencia, la tecnología y la innovación? Si lo sabe, ¿por qué se ha deteriorado la capacidad endógena del país para producir ciencia e investigación?
Sexta:
¿Sabía usted que la capacidad de los gobiernos del presente y del futuro está determinada por el capital humano y la inteligencia para gobernar? Si lo sabe, ¿por qué se ha deteriorado la capacidad de formación e investigación y se ha excluido el conocimiento experto proveniente de las universidades en las decisiones gubernamentales?
Séptima:
¿Sabía usted que son muy pocos los gobiernos del mundo que no están estimulando ni enriqueciendo dentro de todo el sistema de gobierno la cultura de innovación para gobernar? Si lo sabe, ¿por qué las instituciones del Estado están dominadas por el analfabetismo tecnológico?
Octava:
¿Sabía usted que la innovación está generando debates públicos sobre las valoraciones políticas y sociales: soberanía nacional e identidad? Si lo sabe, ¿por qué insiste en confundir a la sociedad con el imperialismo?
Novena:
¿Sabía usted que los gobiernos están utilizando la innovación para liderar el cambio de paradigma en la forma en que brindan su capacidad endógena productiva? Si lo sabe, ¿cuál es ese paradigma que usted entiende y que nosotros no llegamos a comprender?
Décima:
¿Sabe usted qué es el futuro? Si lo sabe, ¿qué es?
Parece claro, que Venezuela tiene opción de destino: un destino que busca enquistarse definitivamente, que no es bueno y que, más allá de criticarlo políticamente, es inconsecuente con un país joven que antes pudo prosperar y que formó gente trabajadora, profesional e inteligente. El otro destino, que se aleja cada vez más, pero que es el deseable, es ese que es capaz de reconstruir un país y llevarlo a dar el salto hacia el futuro sin rentismo, sin depender del petróleo, con política y con políticos inteligentes y con instituciones innovadoras, eficientes con adaptabilidad inmediata al cambio. Pero fundamentalmente creando y utilizando el conocimiento.
El país está amenazado fundamentalmente por poseer una sociedad que aún siendo joven está sometida al envejecimiento. No ha habido gobierno en estos últimos 20 años que haya ejercido la política para enfrentar la intersección de desafíos como el futuro de trabajo, la igualdad y la nueva economía. No ha habido gobierno para pensar en la sociedad inclusiva a través de la innovación, y mucho menos ha habido gobierno para pensar en la economía sostenible, real e inteligente a través de la ciencia y la investigación.
Vemos un país desafortunado, con todas las condiciones para sumergirse en el subdesarrollo del nuevo tiempo, y al cual le será mucho más difícil poderse superar.
¡Disculpen mi pesimismo!