Venezuela lleva más de 50 años viviendo en un socialismo disfrazado de democracia, en principio por los partidos políticos convencionales (Acción Democrática y Copei) desde finales de los años 50 y en la actualidad por todos los miembros que hacen vida dentro de “la mesa de unidad democrática” (MUD), junto a la bancada oficialista del PSUV quienes también se tildan de “demócratas”. La culpa es del socialismo que ha sido inculcado por los partidos políticos convencionales, desde mediados del siglo pasado mediante el bipartidismo AD-COPEI hasta la actualidad, que fue radicalizado por el Partido Socialista Unido de Venezuela con la llegada de Chávez al poder.
Si la culpa es del socialismo es imposible combatir al régimen a través de la MUD, ya que ambos son el mismo niño pero con diferente gorra, es decir, son de izquierda, son socialistas y velan por esta ideología como la mejor herramienta para gobernar en el país y combatir la crisis causada por el, aunque suene irónico. Aquí el socialismo juega a legitimarse entre sí y a esclavizar al pueblo mediante el voto para mantenerse oxigenado, conseguir su legitimación y mantenerse atado en el poder, sin importar las verdaderas calamidades por las que pase el pueblo y obteniendo beneficio propio a costas de la situación del país. Durante los últimos 50 años, específicamente durante la última década, el socialismo se ha encargado de destruir la república, la economía y la sociedad, limitando la libertad del venezolano y coaccionándolo bajo la sumisión y el apaciguamiento impuesto por la MUD y a velando por el ideal sin derecho alguno de ir en su contra, bien sea porque se le ha legitimado o porque se le ha sido impuesto directamente por el régimen.
El socialismo se ha encargado de incrementar la inseguridad, la escasez, el comercio informal y el desempleo. El socialismo es sinónimo de pobreza, ignorancia y miseria, es quien nos ha llevado a la peor crisis social, política, económica y humanitaria que está viviendo día a día el país, en donde quienes la sufren son el pueblo, mientras que los políticos de la MUD-PSUV que son uno solo, los que han resucitado del discurso de izquierda para perpetrarse en el poder se hacen los de oídos sordos, ya que al parecer ellos son los únicos que están bien y se han visto beneficiados por la ideología del fracaso.
En Venezuela no hay derecha alguna constituida como partido político, aquí abunda la izquierda y quienes pregonan por el socialismo. El pueblo se encuentra hundido en aguas socialista donde los presuntos salvavidas también lo son y he ahí la razón por la cual no hemos salido de la crisis. La MUD se lava las manos diciendo que son demócratas e inculcando un falso aire esperanzador en el pueblo, haciendo la costumbre obligatoria para él y manteniéndolo en un constante estado de sumisión para satisfacer al régimen, asegurando a este en el poder y legitimándolo para poder continuar con el complot MUD-PSUV y así ambos seguir haciendo de las suyas embaucando al pueblo a través de la presunta salida electoral y la obtención de poder.