¡Ha muerto el rey… Viva el rey! El tirano y genuino monarca cubano falleció en 2016.Aún con vida designó al hermano menor como su indiscutible sucesor en 2008. Por aquellas manifestaciones monárquicas asimiladas –con precisión de relojería suiza– por casi todos los partidos comunistas. La sucesión presidencial es ejercida mediante los aristocráticos (¡Para nada marxistas!) vínculos de sangre. Al caballo lo sucedió una mula. Al retiro voluntario de ésta lo sucede ahora un espécimen singular: Miguel Díaz-Canel. Se trata de un nuevo “cuadro”; nacido y formado luego del triunfo revolucionario en 1959. Formalmente es el presidente ungido por el cogollo. Como “hombre de aparato” es poco conocido y su figuración pública es discreta. El desconocimiento de sus ejecutorias confiere –en su futura gestión– inequívocos caracteres imponderables. Existe solamente la presunción de que es un hombre de entera confianza del Comité Central del Partido Comunista. Tampoco –por ahora– tiene algún remoquete que lo asocie con algún espécimen animal. Por si acaso tiene un tutorad hoc en una de las cercanas vicepresidencias (Una especie de Comisario Político “bolchevique”). Se trata de Ramiro Valdez, comandante de la Revolución. Un veterano de la Sierra Maestra. Ducho en espionaje y en todo tipo de actividad represiva. La mismaha sido debidamente comprobada en los últimos sesenta años (incluyendo el último como combatiente en la Sierra Maestra). Se trata –más o menos– de un “chivato”, o magister en “chivatería”; para utilizar, en su identificación por comparación, el sentido exacto de su personalidad. Elutilizado comúnmente por la vetusta jerga cubana. ¡Es la espada de Damocles! que pende sobre la testa del novísimo mandamás. Por si se le ocurre distanciarse un ápice de la singular ortodoxia… Es un problema entre “carajos”. El primero es un “carajito” nacido en 1960. El segundo es un “carajete” nacido en 1932.
Para Venezuela la comentada designación tiene vasos comunicantes ineluctables. Los millares de funcionarios cubanos que conviven en nuestro país codirigiendo –con rango de inequívoca preminencia– actividades dentro la FANB. También en otros ministerios; como el de interior y el de sanidad fundamentalmente. Es, paradójicamente, una lúgubre coincidencia de circunstancias; las que estos entes administrativos deberán confrontar a partir del mes que viene. Con un rol protagónico importante derivado de la aguda crisis nacional; y, al detonante esperado y ansiado por las mayorías nacionales el próximo 21 de mayo con motivo a las resultas del fraude electorero que se encuentra en pleno desarrollo.
Decíamos que las ejecutorias del presidente cubano son objeto de simples especulaciones por lo inéditas. Las del segundo personaje cubiche (entendido el término en cualesquier interpretación de etimología) son más espeluznantes y palpables. Basta recordar la cadena de muertes derivadas por el cruento “paredón” aplicado prematuramente, también, desde la Sierra Maestra. Transitando luego la senda con la desaparición y detención de los comandantes históricos Camilo Cienfuegos y Hubert Matos. Continuando este periplo sangriento con la represión generalizada en toda la isla. Además del fusilamiento de los generales de División Orlando Ochoa y la misteriosa muerte en prisión de José Abrantes; quien fuera su sucesor en el Ministerio del Interior. Su inescrupulosa mano ha estado involucrada en todas las purgas políticas –sangrientas o no– acontecidas en aquella sufrida isla.
La contemporaneidad de los presidentes de Venezuela y Cuba en edad es indiscutible. En el aspecto represivo es disímil. El venezolano aventaja al cubano –por ahora– en materia de crímenes políticos. Algunos de estos señalados como de lesa humanidad. Así mismo, de prisiones, torturas y exilios aplicados indistintamente a opositores civiles y militares. En un futuro muy cercano podremos constatar con diáfana claridad la modalidad de conducta que ambos asumirán ante el compromiso ineludible con la historia.
¿Será Miguel Díaz-Canel una especie de “hijo de Putin” repotenciado? ¿Se convertirá en una simple “copia al carbón” del prototipo de régimen instaurado por los hermanos Castro? ¿”Fusilará”, en versión tropical, el peculiar modelo de régimen emprendido por el partido comunista chino? Por lo contrario, ¿trocará en algo parecido a Lech Walesa? Amanecerá y veremos…
Para Maduro y su combo la legítima Asamblea Nacional aún no está muerta. Tampoco de parranda. Sin embargo existe. Así lo ha demostrado la presencia de diputados suyos al acto parlamentario recién acontecido con motivo a la autorización concedida por el Poder Legislativo al Tribunal Supremo de Justicia electo el pasado año; cuya sede administrativa se encuentra fuera de Venezuela. La contradictoria dialéctica empleada por el totalitarismo es parecida a la “ilógica” “lógica” utilizada por algunos pseudo opositores. Para estos tal acto no es constitucional porque se quebrantaron normas adjetivas con motivo al inicio del procedimiento. Obvian –para el análisis global– la circunstancia de que las reiteradas violaciones constitucionales de la dictadura han sido sistemáticas e innumerables. Empezando por la informalidad constitucional y también legal de la convocatoria de la llamada anc. De igual forma el nombramiento de los actuales titulares de la FGR y de la DP. Los extensos desbordes de galimatías y demás contradicciones conceptuales experimentadas podrían servir de argumento a las antiguas peroratas que Cantinflas (considerado por Chaplin como: “El mejor cómico del mundo”; desaparecido hace 25 años) solía proferir. Por supuesto, sin la connotación histriónica del mejicano. Se trata de la “bufa seriedad” que el totalitarismo utiliza para demostrar su inexistente acatamiento integral a la Constitución vigente. Su argumentación es casi idéntica a la que algunos confusos opositores utilizan para criticar la pretendida trasgresión emprendida por parte de la AN.
Lo cierto e ineludible para la respectiva ponderación de los hechos y razonamientos formulados es la cansona insistencia argumentativa ejercida por parte de personajes evidentemente desubicados. En tomar “con pinzas” algunas disposiciones constitucionales. Eludiendo con sibilina y cómoda conveniencia la premisa fundamental de que la Carta Magna es un “todo”. De ninguna manera es posible admitir la incierta eventualidad de que pueda existir una efectiva congruencia entre la vigencia plena de algunas de sus normas; cuando otras –con igual rango– son vulneradas impunemente de diversas maneras. Esta pérfida intencionalidad la ha asumido la robolución como sustento teórico para justificar su permanencia a como dé lugar en el gobierno y propiciar el pernicioso e insufrible continuismo hasta el año 2024. De igual manera se observa con asombro y preocupación (por su indiscutible incidencia en la pérfida desinformación fríamente calculada) esbozar el sistemático uso y abuso de la también difusa y pueril argumentación utilizada –sin ningún tipo de recato– por parte de una muy sui géneris legión de peculiares “constitucionalistas” opositores.
@CheyeJR
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