Mensaje a García. Cuenta la leyenda que la belleza de la actriz Zoe Ducós era singular. También cuenta la leyenda que su matrimonio con el segundo hombre fuerte de la Seguridad Nacional, Miguel Silvio Sanz, le pasó factura al llegar la democracia. ¿Los hechos? Porteña de nacimiento, Ducós vino a Venezuela en 1952 tras empezar carrera en la radio argentina. A los 24 años de edad logró valiosas oportunidades en la naciente revisión y encabezó elencos de telenovelas junto al cotizado galán Miguel Hernández Vera, a quien también estuvo vinculada sentimentalmente. La historia de amor terminó al convertirse en el oscuro objeto del deseo del esbirro zuliano. La boda se realizó en 1955. Al ser derrocado el dictador Marcos Pérez Jiménez, no hubo asientos disponibles en los aviones para que la pareja huyera al lado de los cabecillas del régimen. Él cayó en manos de la justicia, siendo condenado a 18 años de prisión, entre otros casos que se pudieron documentar, por el asesinato del tenor mexicano Genaro Salinas, ex amante de su esposa, quien murió tras haber sido golpeado salvajemente, lanzado desde un puente y arrollado una decena de veces, según el informe forense de la época. Ella pudo regresar a Argentina, mientras el gobierno de Rómulo Betancourt le prohibió la entrada al país. Vencidos los plazos, la actriz decidió volver a la tierra donde había conocido el éxito y donde había vivido como una reina, rodeada de poder y lujos. Al principio obtuvo personajes importantes, pero el propio medio artístico la fue relegando en forma paulatina. Falleció en 2002, prácticamente sola, en un geriátrico de Bello Monte. La historia contiene lecciones que deberían invitar a la reflexión.

En la lucha. A través de su cuenta en Instagram, el cantante y actor Chyno Miranda anunció que vendrá a Venezuela para participar en la gran protesta nacional convocada para el miércoles 19 de abril. Un fragmento de su mensaje dice: “No me importa nada más que la felicidad de mi patria. Porque contigo Venezuela todo lo tengo. Voy por ti. A luchar para verte sonreír”.

Otra vez. El cineasta venezolano Lorenzo Vigas repetirá en el prestigioso Festival de Cine de Venecia, en el que hace dos años marcó un hito al ser el primer latinoamericano en ganar el León de Oro. Esta vez lo hará como productor del largometraje Las hijas de abril, en el que comparte crédito con el realizador mexicano Michel Franco. La cinta entrará en competición en el apartado Una Cierta Mirada. El rodaje, encabezado por la actriz española Emma Suárez, fue en Puerto Vallarta, Guadalajara y Ciudad de México.


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