A sus 82 años y con una brillante carrera detrás, Judi Dench asegura que no le gusta ver sus películas hasta después de mucho tiempo porque siempre encuentra fallos en sus interpretaciones, algo que le pasó al ver La reina Victoria y Abdul en Venecia.
“En el teatro puedes ir cambiando cosas cada día para hacerlo mejor, pero en el cine no es así. Anoche vi la película y hay muchas cosas que cambiaría, pero es demasiado tarde”, afirma la actriz británica que forma parte del elenco de esta cinta dirigida por Stephen Frears, en la que interpreta de nuevo a la reina Victoria, veinte años después de Mrs. Brown.
Esa película se centraba en la relación de Victoria con Brown, que había sido el sirviente de confianza del fallecido esposo de la reina, el príncipe Alberto, mientras que el filme de Frears relata otra extraña relación, la de la soberana con su asistente indio Abdul Karim (Ali Fazal). Y aunque Dench conocía el personaje, le sorprendió la historia de su relación con Abdul, de la que no tenía noticia.
“Tengo casi 83 años de edad y pensar en esa tremenda planificación de una mujer que tenía que tomar el té a las 4: 00 pm, una cita a las 4:30 pm, otra a las 4: 45 pm y de repente encuentra a alguien con quien hablar de igual a igual, algo que no tenía con ninguno de sus hijos, eso le cambia la vida”, relata la actriz.
Una compleja relación que Frears plasma con preciosismo en una película que se rodó en algunos de los lugares reales en los que se desarrolló la acción. “Estoy convencida de que esa relación alargó su vida”, dice la actriz de una reina que conoció a Abdul en 1887, cuando tenía 68 años, y mantuvo ese vínculo hasta su muerte en 1901. “Cuando tienes interés en algo o por alguien, eso te da energía”, opina Dench, quien ganó su único Óscar por interpretar a otra reina, Isabel I, en Shakespeare in Love (1999).