Con Avengers: Infinity War aún en los cines y batiendo récords de audiencia en el mundo, Marvel vuelve a remecer la pantalla grande con la llegada de Deadpool 2.

El popular antihéroe está de regreso. Con Ryan Reynolds tras la máscara roja, el personaje que se niega a seguir los protocolos sigue siendo capaz de sacar risas a los espectadores, pero en esta oportunidad no lo hace solo.

El amigo de Coloso (Stefan Kapicic) se enfrenta a un nuevo desafío: salvar de la rebeldía y de la muerte a un niño mutante que fue torturado para controlar sus poderes. Para lograrlo debe formar un equipo que lo acompañe a batallar, y como era de esperar, forja uno bastante peculiar al que decide llamar X-Force.

Mientras la mayoría de las producciones de superhéroes intentan hacer que sus historias sean aptas para toda la familia, en este caso ocurre todo lo contrario. Muertes, sangrientos enfrentamientos y las bromas de índole sexual, convierten a Deadpool 2 en una ficción para adultos.

Lo que hizo que la primera parte fuera exitosa, esa mezcla de sinceridad con la comedia y la tragedia, continúa en esta segunda versión. Lo divertido continúa saliendo del dolor, y de esa capacidad de Reynolds para estar en medio de la tristeza y luego causar gracia.

Foto: 20TH Century Fox

Deadpool continúa siendo inmortal, pero en esta oportunidad se enfrentará con sus ganas incontrolables por terminar con su vida a raíz de una pérdida cercana. Los intentos por morir van desde hilarantes situaciones hasta tristes escenas que la apartan por unos instantes de las risas.

Personajes como el joven Russell, interpretado por Julian Dennison, vienen a dar frescura a la historia y a convertir en algo interesante la participación de quien en un principio aparenta ser el enemigo: el soldado Cable (Josh Brolin).

La trama fluye rápido y la película es más divertida de lo que se podría haber esperado de una secuela. Todas las referencias a otros filmes tienen sentido y la hacen ser más atractiva de analizar escena por escena.

Los estereotipos siguen presentes, pero lo más probable es que se conviertan en un detalle para la audiencia que ha esperado con ansias la llegada de Deadpool 2 y que, probablemente, ansiará una tercera parte tras finalizar los créditos.


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!