Washington todavía dispone de varias opciones en Venezuela. La intervención militar directa extranjera no es la única. O por lo menos, no con sus soldados. ¿Qué tienen que aprender los venezolanos de los sucesos en Playa Girón?

La intervención militar extranjera a Venezuela es todavía una posibilidad remota. La discusión podría tomar varios años hasta materializarse, como sucedió en Panamá. De hecho, el canciller colombiano Carlos Holmes Trujillos aclaró que Colombia nunca ha insinuado que respaldaría una intervención militar en Venezuela. En comparación a Panamá, los costos de intervenir en Venezuela son mucho mayores, y como en toda intervención, hay grandes riesgos. Desde el principio, la especialista Shannon O’Neil ha desestimado el hipotético escenario, considerando que este requeriría la movilización de entre 100 mil y 150 mil tropas estadounidenses. Debido a su extensión territorial y cantidad de habitantes, una intervención militar en Venezuela es mucho más complicada que en Panamá. Según O’Neil, el caso de Irak tampoco sería la mejor aproximación, en vista de que Venezuela tiene el doble de territorio.

Desde hace muchísimos años, se ha considerado que Venezuela es uno de los puntos más estratégicos en América Latina. En un informe entregado al Congreso Venezolano en 1942, se discute que Venezuela le interesaba enormemente a los nazis debido a su ubicación privilegiada y abundantes riquezas naturales. Las extensas costas de Venezuela en el Mar Caribe y sus numerosas bahías abiertas eran capaces de servir de bases de operaciones navales y aéres contra el Canal de Panamá, llave estratégica de primer rango en la región. El interés de los nazis en Venezuela era tal, que en 1939 se le encargó al periodista Erich Reimers la publicación del libro “Die Welser in Venezuela”, con el propósito de justificar que Venezuela había sido históricamente una legítima colonia alemana.
El alto valor geopolítico de Venezuela, sin embargo, tampoco debe ser sobreestimado. A diferencia de Colombia y Panamá, Venezuela no tiene salida a dos océanos. El punto estratégico por excelencia en el Caribe es el Canal de Panamá: la joya de la corona. Más que importante, es esencial para los Estados Unidos de América el control de este. A través del Canal, es más rápido y económico para los Estados Unidos el traslado mercancías desde la Costa Este hasta la Costa Oeste; y viceversa. Además, esta infraestructura favorece el rápido despliegue militar de tropas estadounidenses, en caso de ser necesario.

La posibilidad de una intervención militar en Venezuela aún no es una preocupación en la región. En primer lugar, Occidente no considera que este sea un asunto urgente. En la balanza, los costos y los riesgos de esta medida siguen superando a sus potenciales beneficios. En segundo lugar, Estados Unidos protegerá la vida de sus soldados a toda costa. Es mejor que sean otros los que lideren el enfrentamiento militar. En tercer lugar, la economía de los países vecinos no pasa por su mejor momento. En cuarto lugar, y no menos importante, Venezuela tiene importantes relaciones con China y Rusia; es una de las grandes diferencias entre la Panamá de 1989 y la Venezuela de 2019. Después de Estados Unidos, Rusia (2) y China (3) son las potencias militares más importantes del mundo entero. Juan Francisco Lobo, coordinador académico de la Universidad Diego Portales en Chile, es uno de los analistas que ha señalado que la solución de la crisis en Venezuela también pasa por China.

Con el fin de provocar un cambio político en el país caribeño, Occidente tiene todavía alternativas más económicas y menos riesgosas que una intervención militar. A través de sus vecinos, Estados Unidos podría apoyar las acciones de grupos armados rebeldes en Venezuela. El antecedente más cercano es la invasión de Playa Girón, o Bahía de Cochinos. Si bien es cierto que esta operación fracasó en Cuba, esto no significa que vaya a pasar lo mismo en Venezuela. Estados Unidos pudo haber aprendido de sus errores.
Con el apoyo táctico de Estados Unidos, Nicaragua y Guatemala, alrededor de 1400 exiliados cubanos invadieron en 1961 el territorio de Playa Girón. “Fuimos completamente abandonados, nosotros y el pueblo cubano, por Kennedy”, dijo el brigadista Oscar Rodríguez en una entrevista a EFE. Raúl Martínez, otro combatiente cubano, cree que el presidente demócrata pudo haber dado la orden de paralizar el desembarco si había cambiado de opinión o no estaba dispuesto a acompañarlos hasta el final. “Muchos creyeron que la negativa de Kennedy a apoyar con aviones a los hombres que perdían en la playa fue una debilidad, y para otros inclusive una traición”, señala Infobae (2011).

Con una enorme y justificada frustración, todavía se discuten las causas del fracaso de la operación militar en Bahía de Cochinos. Desde entonces, han pasado aproximadamente sesenta años y no se ha logrado erradicar al comunismo de Cuba. Unos creen que Kennedy no fue el hombre indicado para aplicar el plan de su antecesor, Dwight Eisenhower, y por eso lo ejecutó con ambigüedad. Otros señalan que, lamentablemente, a Estados Unidos se le presentaron complicaciones que no se podían ignorar en ese momento (revisar el memo del asesor Arthur Schlesinger Jr.). Pero algo es indiscutible: John Fitzgerald Kennedy asumió la responsabilidad de esa derrota.
“En primer lugar, por muy cubana que la operación parezca ser, los Estados Unidos serán responsabilizados por ella ante la opinión pública mundial; nuestra propia prensa se encargará de eso. Mucha gente simplemente no ve que en este momento Cuba presente un riesgo tan grave e imperioso para la seguridad nacional como para justificar un curso de acción que buena parte del mundo interpretará como una agresión calculada contra una nación pequeña.” Schlesinger le advertía a Kennedy.

Al igual que en la Cuba de 1961, Estados Unidos podría participar en el entrenamiento y provisión de recursos a los rebeldes, en este caso venezolanos. La crisis de gobernabilidad en el país sudamericano, el creciente aislamiento internacional que enfrenta el chavecismo-madurismo y el colapso económico sin precedentes que sufre Venezuela, son algunos de los tantos factores que podrían facilitar el surgimiento de facciones rebeldes en el sector militar venezolano. Los importantes aliados estratégicos de Venezuela, como China y Rusia, no necesariamente impedirían una operación en contra del gobierno de Maduro. Lo que suceda en Venezuela dependerá de los términos de las negociaciones y las decisiones acertadas que se tomen, tanto a nivel nacional como internacional. Y después de todo, no olvidemos que Donald Trump y Vladimir Putin son dos hombres que se entienden bien, como grandes políticos y brillantes hombres de negocios.

Para finalizar, son muchas las interrogantes que surgen sobre este tema: ¿quiénes serán los rebeldes que liderarán estas operaciones? ¿Hasta qué punto los gobiernos de Brasil y Colombia estarían dispuestos a cooperar con el entrenamiento de estos grupos rebeldes? ¿Se están evaluando los posibles riesgos? ¿Qué ha aprendido Estados Unidos de la operación militar en Bahía de Cochinos? Si se hacen las cosas bien, Occidente habría triunfado. De lo contrario, podrían pasar varias décadas sin un cambio de rumbo político en Venezuela.

No olvidemos que, el mundo vive tiempos difíciles. Se acerca una nueva crisis financiera global y el orden establecido desde 1945 se tambalea. En un podcast publicado el 28 de diciembre de 2018 por el Modern War Institute (Estados Unidos), el Dr. Hal Brands expone los retos que actualmente enfrenta el orden mundial estadounidense, vigente desde 1945. Ahora más que nunca, es importante tomar decisiones acertadas.


Notas:
    1. El autor de esta publicación ha escrito otros artículos sobre el tema, cada uno con un distinto enfoque. El más extenso se titula “Paralelismos y diferencias entre los casos de Panamá y Venezuela” y el otro “¿Cuánto vale una ubicación estratégica? El Istmo de Panamá”. Este artículo se enfoca en un hipotético escenario como el de Bahía de Cochinos en Venezuela y deja en segundo plano otras interrogantes. Para más información, consultar los otros artículos del autor, incluyendo también “implicaciones de una posible intervención militar en Venezuela” y “Noriega no creía que la invasión de Panamá era inminente”.
    2. Freddy Vivas Gallardo (1993): “El 14 de junio de 1940, la Radio de Berlín describió a Uruguay y Venezuela como países incapaces de gobernarse a sí mismos, y se indicaba que Venezuela era una base importantísima, situada (…) dentro del baluarte proyectado del Caribe que dominaba al Canal de Panamá”
    3. Otto Strasser en Freddy Vivas Gallardo (1993): “Según Hitler, Venezuela es el país más importante por la posibilidad de detener desde allá al fuerte ejército, la marina y la guerra aérea de Estados Unidos (…)”
    4. Cuba todavía tiene una base militar estadounidense: Guantanamo. El cheque por 4085 dólares se expide cada año en abril, a nombre del tesorero general de la República de Cuba. Desde 1959, los pagos no son recibidos por el gobierno cubano. Guántanamo es tan cubana como estadounidense. Aunque técnicamente es territorio de Cuba, entra en la jurisdicción de Estados Unidos. En Guántanamo existe un gran vacío legal que todavía puede ser usado para una intervención militar.
    5. Aunque Estados Unidos se ha planteado la posibilidad de cerrar la base militar de Guantánamo, eso no significa que cederá el control del terreno en el cual se encuentra la base. Estados Unidos tiene muchas propiedades y activos en Guántanamo; es poco probable que los ceda.
    6. En caso de que Estados Unidos decidiera intervenir militarmente en Cuba, Guántanamo se considera el primer punto de respuesta y la frontera más cercana entre ambos países.
    7. Para Estados Unidos, la importancia estratégica y simbólica de Guántanamo es muy alta. En realidad, no solo le permite tener un eje de acción y poder sobre Cuba; Haití, Jamaica y otras poblaciones también se encuentran en la zona adyacente.
    8. En la Caimanera, el pueblo cubano que rodea la base militar estadounidense de Guantánamo, las condiciones de vida muy estrictas, por más que existan beneficios especiales.
    9. Durante su campaña presidencial, Donald Trump juró mantener abierta la prisión de Guantánamo [Cuba] y llenarla con algunos tipos malos. Desde entonces, sin embargo, ni la Casa Blanca ni el congreso se han pronunciado.
    10. Es curioso que, justo un mes antes de la intervención militar de Panamá, una delegación había viajado a Moscú (capital de Rusia) para firmar importantes acuerdos comerciales con la Unión Soviética. En 1988, es que se empieza hablar, con mayor seriedad, del establecimiento de relaciones diplomáticas entre Panamá y la Unión Soviética. Noriega no había mostrado gran interés. ¿Qué habría pasado si hubiera hecho lo contrario?
    11. Aunque Rusia es una de las principales potencias militares del mundo -la segunda en la mayoría de los rankings-, el desempeño económico de este país sigue estando muy por debajo de su potencial. China le lleva la delantera como candidata emergente a superpotencia mundial.

Datos de contacto de la especialista Shannon O’Neil: [email protected]


Autor: Vicente Quintero Príncipe @vicenquintero / www.medium.com/@vicentequintero

Vicente Quintero es Licenciado en Estudios Liberales de la Universidad Metropolitana de Caracas, con énfasis en el área política. También ha tomado cursos de cultura y política en la Universidad Politécnica Estatal de San Petersburgo (Rusia). Quintero es columnista de El Nacional Web (Venezuela), The Global World (España), WTC Radio (Venezuela), ProEconomia, Alternos (Venezuela), American Herald Tribune (Estados Unidos) y La Trenza (México). Sus artículos también han sido publicados por Entorno Inteligente (Venezuela), Maduradas (Venezuela) y Иносми — Россия Сегодня (Rusia). En el año 2018, ha tenido la oportunidad de presentar sus obras de arte en el Museo Alejandro Otero (Fundación de los Museos Nacionales de Venezuela). A través del arte, Quintero expresa la realidad política y económica del mundo. Quintero habla cuatro idiomas: español, inglés, ruso y alemán.


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