El feliz despliegue ofensivo de Manuel Piña en el primer mes de temporada nos hizo pensar que, en este inicio de campaña, parecieran haber sido más los batazos inesperados que los presentidos, por más que últimamente hayan producido tanto los nombres de siempre, encabezados por José Altuve y Miguel Cabrera.

¿Es así? ¿O se trata de una falsa impresión, causada por el estruendo que dejó el primer jonrón del Cafecito Martínez, el constante ataque de Avisail García y la seguidilla de Piña con 10 juegos dando hits?

Sólo por jugar, fuimos al motor de búsqueda de Baseball Reference y le pedimos que precisara el WAR de cada integrante de la embajada nacional en 2017. Ya que ese instrumento toma en cuenta toda estadística ofensiva y defensiva de un pelotero, reduciéndolas a una sola cifra, sirve perfectamente para una comparación.

La primera sorpresa fue encontrar a Eugenio Suárez como el número uno de Venezuela, con 1.9. Es muchísimo. Si mantuviera este paso, terminaría con 11.4, un valor que prácticamente nadie alcanza.

Al antesalista de los Rojos de Cincinnati le ayuda su defensiva. Una cuarta parte de su cosecha responde a lo hecho con el guante. Lo demás se sostiene mayormente en esos 6 tubeyes y 5 cuadrangulares, que podrían ponerle por primera vez arriba de los 40 dobletes y los 30 vuelacercas.

La segunda sorpresa fue mirar hacia abajo en el listado. Si usamos el WAR para ordenar a los mejores criollos en este mes inicial, encontraremos pocos “sospechosos habituales” y muchos héroes inesperados.

Hay 10 nativos con 0.5 para esta fecha, lo que también es muy bueno. Son estos, luego de Suárez: Piña (1.4), César Hernández (1.0), David Peralta (0.8), Odúbel Herrera (0.8), Robinson Chirinos (0.8), García (0.7), Altuve (0.7), Hernán Pérez (0.7) y Elvis Andrus (0.5).

Vaya, qué lista agradable.

Hay tres jugadores que ni siquiera son oficialmente titulares: Piña está peleando, con buenos argumentos, para quedarse como el careta de todos los días en Milwaukee; Chirinos es el guardaespaldas de Jonathan Lucroy en Texas, sin muchas perspectivas de desplazarlo, salvo por alguna ausencia forzada; y Pérez aprovecha su estatus de súper utility, a fin de abrirse lugar aquí y allá, en el cuadro o los jardines.

Hernández viene de su mejor torneo, pero ciertamente no es uno de los intermedistas más reconocidos en nuestra tierra. Peralta viene de un año casi perdido, debido a las lesiones. Andrus por fin explotó con el madero en 2016, pero hay que precisar otro feliz hallazgo, y es que su WAR prácticamente se nutre por completo de lo que está bateando, no de su despliegue atlético en el short.

Y lo de García merece una mención aparte. Al escribir estas líneas, todavía aparecía como líder bate de la Liga Americana, con .373 de average. Se está embasando muchísimo, pues además cuenta 5 bases por bolas, y su slugging es excepcional, gracias a 3 dobletes y 4 bambinazos. Por eso, tiene 1.020 de OPS.

El anzoatiguense radicado en Maracay no tenía un lugar seguro en el outfield de los Medias Blancas hace apenas seis u ocho meses. Su carrera parecía haber perdido impulso, luego de llegar a las Mayores entre tantas expectativas y pronósticos.

Allí están, grosso modo, los mejores venezolanos en este inicio de temporada. Que sigan las sorpresas agradables, los héroes inesperados.

@IgnacioSerrano

www.elemergente.com


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!