El Águila volvió a anidar en enero. Es el segundo año consecutivo que lo hace, un suceso que demuestra franca recuperación, pues hace dos temporadas fue una especie extinta en la instancia. La clasificación del Zulia se dio el sábado, después de doblegar a Bravos de Margarita y combinar el revés de Tiburones de La Guaira ante Navegantes del Magallanes.
El pase a los playoffs es solo el primer requisito que tienen los rapaces para tratar de emular el campeonato conquistado el año pasado. Un cetro que, por cierto, fue logrado con vehemencia y autoridad, tras dominar a placer la postemporada. Incluso la serie final, contra Cardenales de Lara, la terminaron en solo cinco juegos.
Repetir una gesta así es complicado, sobre todo en torneos tan imprevisibles como los caribeños, plagados de limitaciones y ausencias repentinas. Eso no hay que recordárselo a Lipso Nava, manager de la parvada que, durante la celebración sabatina, advirtió de la fiereza de la próxima fase.
“Tenemos que seguir pensando en mejorar”, opinó el piloto tras lograr la victoria 30 en esta ronda regular. “Seguir adelante, poder minimizar o tapar esos huecos que tenemos ofensiva y defensivamente. Tengo fe, pues sé que la gerencia está haciendo todo lo posible para que eso suceda”.
Las flaquezas en el ataque a las que se refiere Nava se concentran en la actuación de los bateadores occidentales cada vez que se encuentran con hombres en posición anotadora. En tales casos la novena amaneció ayer con 58 carreras anotadas, la segunda cantidad más baja del torneo.. Ni siquiera Tiburones y Bravos, los conjuntos más débiles en el campeonato, han pisado el plato en menos oportunidades las veces que consiguen a corredores que pueden llegar a home con solo un hit.
Además, Águilas es la tercera peor novena a la defensiva con 57 errores cometidos y al menos 16 de ellos han ocurrido en el campocorto, una posición que ha pasado por muchas manos y que aún no ha conseguido un dueño fijo. Por las paradas cortas estuvo Alí Castillo, quien fue el más sólido antes de caer lesionado; también Yelsin Gudiño, Osleivis Basabe, Kristian Trompiz, Bryan Flete y Argenis Díaz, el actual poseedor del territorio.
Las fortalezas. La clasificación del Zulia cae en un buen momento y no tanto por haber ocurrido antes de las festividades navideñas. El festejo en el centro del Luis Aparicio “El Grande” fue la despedida del puertorriqueño David Vidal, uno de los mejores bateadores del club y que no seguirá. Mientras que el inicialista Reynaldo Rodríguez podrá cumplir en paz su suspensión de 8 encuentros, por haberse subido a las tribunas en Maracaibo a encarar a un fanático que lo insultaba impiadosamente.
Y Arcenio León, el cerrojo establecido desde la zafra anterior, ha alcanzado su mejor forma. Entre jueves y sábado logró cuatro rescates y en sus últimos 10.0 innings solo ha aceptado una anotación. Sus problemas con la gerencia y el equipo quedaron atrás –en noviembre se quejó por los largos trayectos en autobús-, a tal punto omitió el cansancio para ayudar en la clasificación.
“Yo debí descansar pero era una jornada muy importante y quería poder celebrar como era”, comentó León después de sacar el out que metió a los alados a enero. “Solo quiero seguir haciendo mi trabajo de la mejor manera para ayudar al equipo”.
Tigres en cualquier momento
Los Tigres de Aragua no pudieron celebrar su clasificación el sábado. A pesar de ello, es casi un hecho que lo iban a lograr en cualquier momento. Los Bravos de Margarita ya no los podían alcanzar el domingo y lo Tiburones de La Guaira solo tenían la oportunidad de igualarlos. Los bengalíes esperaban que con una victoria de ellos sobre los Caribes de Anzoátegui o una derrota de los escualos ante los Leones del Caracas, el boleto a los playoffs les llegara a la puerta. La undécima semana, la penúltima de la campaña, solo será hasta el viernes debido a las festividades navideñas que abarcarán el fin de semana.