Los Astros de Houston abrieron este miércoles las puertas del FITTEAM Ballpark en Palm Beaches, su complejo de entrenamientos primaverales en Florida, para recibir a sus lanzadores y receptores, aunque terminaron llevándose una sorpresa.

El venezolano José Altuve, su principal figura, no quiso esperar más y se presentó de manera prematura para iniciar su reacondicionamiento físico, después de que al final del año pasado se sometió a una cirugía antroscópica para reparar su rodilla derecha, que tanto problemas le causó la zafra anterior.

La principal estrella de los siderales se sumó a sus compañeros varios días antes de la fecha estipulada para los jugadores de posición y le manifestó al Houston Chronicle sentirse listo para comenzar a afrontar la primavera.

“Me siento bastante bien. Con una operación de rodilla puedes sentirte un poco incómodo, sobre todo pensando en el futuro, pero aquí estamos. Listos para comenzar una nueva temporada, con otra buena oportunidad para nosotros de volver a ganar la Serie Mundial”, dijo Altuve.

No escapa de la realidad. Aunque la conversación con el periodista Chandler Rome, representante del medio de la ciudad a la que pertenecen los Astros no se centró solo en el aspecto beisbolístico.

El comunicador aprovechó la oportunidad para preguntarle sobre su visión acerca de los hechos políticos y sociales acaecidos en Venezuela durante los últimos años, así como  también recientemente.

“A todos los jugadores latinos, a todos los jugadores que no son de Estados Unidos, les gusta ir a su país. Pero a veces no puedes y es triste”, dijo José Altuve, quien confesó que durante la temporada muerta no viajó a su tierra natal por precaución.

Para el mejor segunda base de la liga, según un estudio de MLB, la situación solo perjudica al gentilicio nacional más allá de los que ostentan el poder, por ello expresó su máximo anhelo fuera de los terrenos. “Solo quiero que se resuelva todo. Quiero que la gente vuelva a mi país, han estado luchando todos los días por lo que quieren, así que espero que obtengan lo que quieren y nos conviertan en un país mejor”.

Por una buena causa. Con diferencia de José Altuve, su coterráneo y nuevo compañero de equipo, Robinson Chirinos, si estuvo en su nación de origen durante el receso invernal.

Solo una razón de causa mayor lo hizo desistir de la idea de quedarse en Estados Unidos y fue su compromiso con su pueblo del estado Falcón, a quienes ayuda por intermedio de la fundación que lleva su nombre.

“Durante los últimos dos o tres años hemos estado entregando juguetes, medicinas e incluso alimentos. Tratamos de llegar a la comunidad para hacerles saber que estamos para ayudarlos”, esbozó el receptor, quien al principio se encargaba de repartir implementos de beisbol a los niños y jóvenes de su zona de nacimiento.

Sobre sus familiares, Chirinos expresó que todos están bien, pero que de igual manera les ha tocado lidiar con las vivencias del ciudadano de a pie. “Están sobreviviendo y tratando de encontrar medicamentos y alimentos. Todos en este momento, en cuanto a la salud, están bien, pero no del todo, como la mayoría de los venezolanos”.

Para finalizar, el careta que lucirá su tercer uniforme distinto en las mayores tras el de los Rays de Tampa y los Rangers de Texas, no ocultó su pesar por la crisis que viven sus paisanos.

“Las personas no merecen lo que está sucediendo allí y cómo están sufriendo cada día para obtener cosas básicas. Estoy rezando y espero que mejore para todos”.


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!