El inicio del conjunto Caribes de Anzoátegui en la temporada 2017-2018 de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional no correspondía a la imagen dejada en los torneos anteriores.

Los orientales solo pudieron obtener un triunfo en los 10 primeros juegos de la zafra, algo que había encendido las alarmas en el seno de la organización.

Sin embargo, ayer cerraron de forma positiva lo que fue la segunda semana al batir por segundo día corrido a Leones del Caracas, esta vez con pizarra de 6-3.

Fue este el tercer triunfo de Caribes en los últimos cuatro compromisos y su récord mejoró a 4-9, aunque sigue siendo negativo y se mantiene en el último lugar de la tabla de clasificación.

Su visita a la capital del país terminó siendo fructífera. La toletería apabulló ayer a los lanzadores melenudos, al punto de que conectaron hasta catorce imparables, su cifra más alta en lo que va de campaña.

Balbino Fuenmayor y Luis Domoromo fueron los escollos más grandes para el pitcheo caraquista. Entre ambos conectaron seis imparables en ocho turnos, con una fletada y una anotada.

Pero fue el experimentado infielder Luis Hernández el bateador que más hizo daño con sus dos inatrapables en cuatro veces, que sirvieron para remolcar par de rayitas.

Sus lanzadores también lucieron en el Estadio Universitario, sobre todo el cuerpo de relevistas, que tras una prematura salida del juego por lesión del abridor estadounidense Nick Greenwood, se exhibió intraficable y permitió solo una anotación en 5.2 innings, con tres ponches sin boletos.

Por el lado contrario, el surafricano Dylan Unsworth dominó durante las primeras cinco entradas como abridor de Leones, pero en el sexto acto decayó y con tres carreras admitidas terminó como el derrotado.

El bullpen de Mike Rojas –que venía siendo uno de sus argumentos– tampoco cumplió, por lo cual los capitalinos terminaron el segundo calendario de la LVBP con récord negativo de dos lauros por cuatro descalabros.


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