Todo ocurrió con la medianoche al acecho. Al general, célebre por su puño de hierro y voz de mando intransigente, le fue arrancada toda autoridad de la tropa que alguna vez dirigió a tantas batallas gloriosas. Su caída llegó con la derrota tan cercana como lejana le era la victoria.
Así se puede describir el final de un alto oficial en una institución castrense o los últimos momentos de Buddy Bailey al frente de los Tigres de Aragua. El manager fue despedido después de que los bengalíes cayeran el sábado ante los Leones del Caracas, y vieran la serie colocarse 3-1 en contra, apenas a un paso del abismo.
La resolución fue desarrollada luego de que el tren directivo de la organización entrara al alicaído clubhouse. “El ambiente no era bueno, no vimos optimismo ni unión”, comentó Nelson Pogglioli, gerente deportivo de la organización. “Nos reunimos con los peloteros, fue una decisión que se tomó en conjunto, oficina y jugadores. Fue bastante difícil por lo que representa Bailey para el beisbol venezolano”.
La salida del estratega, que también conllevó la partida de Desi Wilson (coach de bateo y su mano derecha), pone fin a una larga estadía en el dugout de la izquierda del José Pérez Colmenares de Maracay. La primera vez que se le vio como la máxima autoridad de la manada fue en la inconclusa campaña 2002-2003, precisamente una zafra después de que Bill Plummer fuese botado por Aragua en la final contra los Navegantes del Magallanes.
Tras 12 campaña sucesivas, seis títulos en la LVBP y uno en la Serie del Caribe como el piloto de los rayados, estuvo al frente de los Tiburones de La Guaira por dos campeonatos. Luego retornó a los Tigres como coach de banco de Eduardo Pérez, quien fue cesanteado durante la ronda regular de la temporada anterior.
“Bailey es un señor de beisbol que comprendió la decisión”, dijo Pogglioli antes de confirmar que Carlos García, coach de banco del relevado manager, fungirá como el nuevo estratega del equipo. “Hubiese sido una locura buscar a un manager de afuera a estas alturas. Además, García es un hombre conocedor del beisbol venezolano. Fue un pelotero de importancia y sabe lidiar con los llamados ‘caballos’. A él se le pidió que fuese franco y honesto. Que tratara de la mejor forma posible a los peloteros y que buscara un cambio de ambiente en el clubhouse”.
De acuerdo con fuentes, y algo que no es de extrañar por su característica forma de dirigir, Bailey no era popular en el seno de los peloteros de los Tigres. Algunos hombres se quejaban de “problemas de comunicación”, una acusación que también se le hizo al timonel durante su exitosa cosecha con la dinastía aragüeña de la década pasada.
“No comparto el punto de vista de algunos fanáticos que señalan que al manager no se le dieron las piezas. La gerencia se movió. Se cumplió con los requisitos. Se exigió la presencia de un pelotero criollo con experiencia y se trajo a José Castillo. También se pidió un pelotero grandeliga con influencia en el clubhouse y la afición, y se consiguió el permiso de Hernán Pérez. Y para los playoffs se reforzó el bullpen con cinco lanzadores”, expresó Pogglioli. “Son decisiones que hay que tomar a veces. Sencillamente, al manager no se le dieron las cosas”.
La cifra
408 triunfos de por vida tiene Buddy Bailey en la ronda regular como manager de los Tigres de Aragua. También acumuló 359 derrotas.
El dato
Es la segunda vez que Buddy Bailey es despedido por los Tigres de Aragua. La primera ocasión ocurrió a mediados de noviembre de 2013, cuando tenía récord de 12-14.