Apoyados en 36 puntos del armador Stephen Curry, los Golden State Warriors dieron el primer golpe este martes en la final de la Conferencia Oeste de la NBA, al vencer a los Portland Trail Blazers 116-94.
A pesar de la ausencia de su máximo anotador, el alero Kevin Durant, aún lesionado en su pantorrilla, Curry y sus compañeros nunca se vieron seriamente amenazados por los Trail Blazers. El estelar francotirador convirtió nueve de 15 triples y fue acompañado en el ataque por el escolta Klay Thompson, con 26 cartones, y el ala-pívot Draymond Green, con 12 y 10 rebotes.
Curry fue el eje principal de la victoria de los Warriors, que salieron al frente 1-0 y el jueves ejercerán otra vez de locales en el segundo juego de la serie al mejor de siete encuentros. «Jugamos bien, pero hicimos lo mínimo que se esperaba de nosotros para ganar el primer juego en casa, pero esto está lejos de terminar», señaló el base.
Por los Blazers, destacaron el base Damian Lillard, con 19 puntos; el escolta C.J. McCollum, con 17; y el alero Rodney Hood, también con 17 pero saliendo de la banca.
Agresivos empezaron los campeones defensores al ganar el primer cuarto por 27-23, gracias a ocho puntos en ese período de Curry, quien alcanzó el descanso con 19 y cuatro triples de siete intentos, más ventaja de 54-45 en el marcador para los de Oakland. El base, que se retiró a los vestidores en el primer intermedio, al parecer con alguna molestia (está jugando con dedos lesionados), regresó finalmente y no evidenció mayores problemas físicos.
Los locales empezaron el tercer cuarto con un parcial ofensivo de 8-0 y alargaron la ventaja a 62-48, apretando el acelerador en el último periodo, que ganaron ampliamente 39-23 con 11 puntos de Curry. Portland se acercó a seis puntos en el arranque del cuarto período (79-73), pero los californianos recuperaron rápidamente el dominio del partido gracias al dúo Curry-Thompson.
«Fue un poco difícil física y mentalmente después de que el Juego 7 se ganara el domingo en Denver para venir directamente aquí y enfrentar al mejor equipo del campeonato», dijo Lillard.
Pero su técnico, Terry Stotts, opinó lo contrario: »Es posible que haber jugado un partido emocionalmente intenso dos días antes haya tenido un impacto, pero eso no es una excusa. Realmente perdimos demasiados balones, tomamos decisiones equivocadas y nunca logramos encontrar nuestro ritmo en el ataque, fue una noche difícil», siguió.
Aunque dominaron de principio a fin este primer juego, los Warriors son cautelosos antes del segundo partido el jueves, todavía como locales. «Se harán ajustes y analizarán los videos de este juego, estarán mejor preparados, simplemente ahora aprovechamos la situación», dijo Steve Kerr, entrenador de Golden State.
Los Warriors convirtieron 17 de 33 triples, por solo siete de 28 sus rivales. Asimismo, han jugado en las últimas cuatro finales de la NBA y hanganado tres (2015, 2017 y 2018).
El primer partido de la serie por el campeonato de la Conferencia Este entre los Milwaukee Bucks y los Toronto Raptors será el miércoles en casa de los primeros. Los ganadores de las finales de conferencia conseguirán boleto para la serie final de la NBA, que comenzará el jueves 30 de mayo.