La Feria Iberoamericana de Arte estaría celebrando este año su 25° aniversario, pero desde 2016 solo se realiza el Salón Jóvenes con FIA, la exposición que se organizaba en paralelo y que ha servido como plataforma para proyectar el talento de noveles creadores del país hacia importantes esferas de la plástica contemporánea internacional. Hoy se inaugura en Maracaibo la edición que lleva por título El poder y diálogos visuales, en la que 20 artistas dan cuenta del entorno a través de la expresión.
En el Salón Jóvenes con FIA han participado cerca de 500 artistas. Se comenzó a celebrar en 1998 en el Ateneo de Caracas y desde el año pasado se realiza en el Museo de Arte Contemporáneo del Zulia. En esta, la vigésima edición, 19 venezolanos y un chileno se han inspirado en el registro de la memoria de una nación y su sentir. El ganador, que recibirá un premio en metálico, se anunciará esta tarde.
25 años de trayectoria. Desde 1992 se organizaba en Venezuela la Feria Iberoamericana de Arte, un evento que lograba reunir galerías, coleccionistas, creadores y público en general deseoso de conocer el arte de la región. La FIA, como era conocida en todo el entorno artístico nacional e internacional, llegó a registrar más de 15.000 asistentes.
Debido al cierre de la frontera con Colombia, además de la complejidad económica y logística que representaba llevar a cabo el evento, desde 2015 se dejó de realizar la que hasta ese momento era la feria de arte contemporáneo más antigua de Latinoamérica. Sin embargo, el Salón Jóvenes con FIA resurgió en 2016 con el apoyo del Museo de Arte Contemporáneo del Zulia, su sede desde entonces.
Banesco, que repite por segundo año consecutivo, y Suelopetrol son las únicas empresas patrocinantes del Salón Jóvenes con FIA, que antes solía contar con el apoyo del Banco Mercantil, la Colección Patricia Phelps de Cisneros, Supercable, Fundación BBVA, Corp Banca y la Cantv, entre otras empresas públicas y privadas.
El traslado de las piezas hasta Maracaibo no fue fácil. Sin embargo, todos los participantes hicieron esfuerzos para tener la posibilidad de exponer en un salón que ha catapultado a artistas como Alfredo Sosa, Alexander Apóstol, Juan Araujo, Ángel Marcano, Nayari Castillo, Luis Mata, Beto Gutiérrez y Jonathan Lara.
Venezuela es la musa. “En todas las ediciones del salón se puede ver una evolución de las propuestas de jóvenes artistas que han sido consecuentes con la creación y con sus temas de trabajo”, indica el curador de la muestra, Yuri Liscano, quien además señala el punto de encuentro de todas las piezas que se van a exhibir: el país.
“La realidad económica, política y social venezolana está tácitamente entendida en las piezas. Tal vez no es del todo la intención de las obras, pero el entorno y la dinámica de vida siempre permean en el proceso de creación. Hay propuestas directas como la de Francisco Acuña, que presenta unas estampillas con la imagen de los jóvenes caídos en las protestas y unos pranes, o la de Ricardo Arispe, en la que se puede reconocer a un diputado o a un manifestante”, detalla Liscano.
Luego de que se anuncie el ganador del Salón de Jóvenes con FIA, la exposición se mantendrá abierta al público hasta diciembre en las salas 1 y 5 del Maczul.
Sobre la realización de la exposición en el estado Zulia, el curador expresa: “Siempre hablamos de Caracas como un lugar donde se centraliza el poder. Sin embargo, aunque el hecho de que se realice el salón en el Zulia tiene que ver con la situación económica del país, también es un apoyo importante a la región que facilita, además, la participación de artistas de estados como Mérida, Lara y Barinas”.
Dos décadas en retrospectiva
Paralela a la edición 2017 del Salón Jóvenes con FIA se presentará una muestra retrospectiva de 20 años de recorrido marcados por la diversidad y conceptos múltiples, que cuenta con la curaduría de María Luz Cárdenas y Alberto Asprino.
Trabajos de Eduardo Molina, Gustavo Artigas, Federico Ovalles, Reymond Romero y Jaime Gili, entre otros, serán expuestos. Cada uno de los ganadores de las ediciones anteriores tendrá un espacio, en el que se podrán admirar incluso los cambios sociales y culturales.
“Más allá de las obras y de la trayectoria de cada uno de los ganadores, hay que destacar un punto de encuentro importante y es que cada uno de ellos expone una memoria viva del país. Todos los exponentes dan cuenta de esa potencia creadora que va desde lo individual y se engrandece en lo colectivo, que es lo que el país necesita”, asegura Asprino.