Londres. A la multitud de mercados que funcionan todo el año se suman clásicos de la Navidad como el Wintertime Christmas Market, el Christmas by the River, el mercado navideño de Greenwich y el centro de las celebraciones: Winter Wonderland, en Hyde Park. Abierto hasta el 1° de enero, tiene dos mercados (German Christmas y Angels Christmas), la pista de hielo más grande de Reino Unido, espectáculos musicales, bares y restaurante. La Navidad continúa en zonas comerciales como Carnaby Street, Knightsbridge, Oxford Street y Covent Garden, donde se instala uno de los árboles de Navidad más icónicos. También son imperdibles las pistas de hielo del Museo de Historia Natural, la Torre de Londres y Somerset House. El Festival de Navidad en el Royal Albert Hall, El Cascanueces en el Royal Opera House o los villancicos junto al famoso árbol de Navidad de Trafalgar Square son indispensables.
Nueva York. Las celebraciones comenzaron con el encendido del árbol de Navidad del Rockefeller Center. Es casi obligatorio pasar por mercados navideños como el de la estación Grand Central, el de Union Square, el Holiday Market de Columbus Circle y el célebre Winter Village, en torno de la pista de hielo del Bryant Park (la única gratuita). El gran evento de la temporada es el Radio City Christmas Spectacular, de la compañía de danza The Rockettes, que protagoniza el auténtico cuento de Navidad neoyorquino. La pista de hielo del Central Park es otra alternativa para patinar en un escenario único.
Praga. Uno de los mejores planes es visitar la plaza de la Ciudad Vieja, así como el gran árbol de Navidad adornado con 100.000 bombillos que se instala allí. Los lugares más bellos son en el puente de Carlos, la pintoresca calle Karlova o la Malá Strana, la catedral de San Vito y el barrio del Castillo con su callejón de oro, que parece sacado de un cuento infantil. Los mercadillos navideños más representativos son el mercado de la plaza Námestí Republiky, el mercadillo de Havel, el mercado de la plaza de Wenceslao y el mercado de la plaza de la Ciudad Vieja.
Bruselas. Las pistas de patinaje sobre hielo, los ‘waffles’ calientes, la nieve y las luces han hecho de esta ciudad uno de los destinos predilectos de los turistas para pasar estas fechas. El programa de actividades culturales incluye conciertos, obras de teatro y atracciones como la pista de hielo instalada en la Place Sainte-Catherine y el mercado de los placeres navideños. En esta época, turistas y lugareños suelen subir a la altísima rueda de Chicago de la Place Sainte Catherine para disfrutar de una vista mágica, nevada y llena de luces. También son infaltables el gigantesco árbol de Navidad de la Grand Place, les Galeries Saint-Hubert, los gofres de Le Funambule y el mercado de Navidad de Winterwonders.
Fuente: EFE