Luisa Ortega Díaz fue invitada por el Vaticano en condición de fiscal de Venezuela a la Cumbre de Juezas y Fiscales sobre la Trata de Personas y el Crimen Organizado. 

Durante su ponencia, la funcionaria, destituida por la asamblea nacional constituyente, advirtió que Venezuela se encuentra entre los países peor evaluados en materia de trata de personas. 

Además, denunció que la masiva migración de venezolanos es aprovechada por redes laborales sexuales y por mafias dedicadas a comerciar con la libertad y la mano de obra de los ciudadanos. 

«Venezuela dejó de ser un territorio receptor de migrantes, ahora es un país cuyos ciudadanos son migrantes masivos, forzados por un gobierno que ha diseñado todo un sistema de gestión pública que limita las oportunidades de crecimiento», explicó durante su ponencia. 


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