Las palabras de Henry Ramos Allup se las llevó el viento.
A pesar de que durante la campaña de las elecciones regionales el secretario de Acción Democrática (AD) insistió en que los gobernadores que resultaran escogidos por la gente no se juramentarían ante la asamblea nacional constituyente (ANC), en la práctica ocurrió todo lo contrario.
Advertencias como “nadie se tiene que subordinar a nada que no esté en la Constitución” o “no se van a juramentar ante otra instancia que no sean los concejos legislativos”, dichas por el propio Ramos Allup, finalmente no se cumplieron.
De hecho, de los cinco gobernadores pertenecientes a la Mesa de la Unidad Democrática, solo los militantes de AD acudieron a la ANC, mientras que Tomás Guanipa, de Primero Justicia, sigue sin reconocer al parlamento chavista.