El presidente de la Asamblea Nacional, Julio Borges, envió una carta al grupo de banca de inversión Goldman Sachs para manifestar su rechazo a los bonos vendidos por la estatal petrolera Pdvsa, valorados en 2.800 millones de dólares.
Borges aclaró que «toda deuda que adquiera la nación sin aprobación de la Asamblea Nacional será inexistente».
«Como presidente de la Asamblea Nacional me encuentro preocupado e indignado porque Goldman Sachs ha decidido adquirir 2.800 millones de dólares en bonos al dictador Nicolás Maduro, lo cual provee un salvavidas a un régimen autoritario que viola sistemáticamente los derechos de los venezolanos», escribió el parlamentario en la carta dirigida específicamente a Lloyd Blankfein, director ejecutivo de una de las bancas de inversión y valores más grandes del mundo.
El diputado expresó que la decisión de Goldman Sachs de ayudar al gobierno venezolano es una clara violación del propio código ético de la empresa, el cual reconoce y asume »una seria responsabilidad de ayudar, proteger, preservar y promover los derechos humanos en todo el mundo».
Borges explicó a Blankfein en la carta abierta, difundida en su cuenta de Twitter, que la nueva inversión que ha realizado el grupo empresarial sólo fortalecerá la «brutal represión desatada en contra de cientos de venezolanos que protestan pacíficamente por un cambio político en el país» y que ha derivado en la muerte de hasta ahora 57 personas, 13.000 heridos y cerca de 2.000 detenidos injustamente y procesados de forma ilegal en tribunales militares.