Lamentablemente uno de los males que afecta a la disidencia política en Venezuela es la falta de confianza. Esa es una secuela del esfuerzo que ha hecho el gobierno para destruir a quien se le oponga. Muchos son quienes invierten su tiempo desacreditando a la MUD, pero en la realidad hacen poco por concretar el cambio y ahí están cayendo en la estrategia oficialista.

Y cuando hablo de disidencia incluyo a dirigentes políticos, partidos y ciudadanos. Hemos caído en el error de flagelarnos nosotros mismos, lo que por supuesto ha tenido una importante incidencia en la construcción de la verdadera Unidad.

La reanudación de las conversaciones para explorar la posibilidad de instalar oficialmente una mesa de diálogo, con el fin de encontrar salidas a la profunda crisis y el largo conflicto político, generaron voces de rechazo, acusaciones y dudas que carecen de todo fundamento.

Quienes se oponen al diálogo para resolver la crisis, pareciera que están satisfechos con la situación actual. Se rasgan sus vestiduras llamando «colaboracionistas» a cualquiera que propone algo que ellos desechan por no ser una solución radical. Quieren una guerra, como si esa fuese la solución real.

Muchas veces lo he dicho y lo sigo sosteniendo: en Venezuela no hay salidas mágicas y mucho menos rápidas. ¿Y por qué no las hay? Porque desde la MUD no estamos luchando con demócratas. No estamos frente a políticos, sino a personas que solo quieren sostenerse en el poder.

El diálogo con condiciones claras, con mucha transparencia y con el apoyo de la presión internacional puede generar el cambio que tanto anhelamos. No podemos caer en el juego oficialista de destrozarnos nosotros mismos. Tenemos que actuar en bloque para derrotar el juego distraccionista del régimen.

La salida en Venezuela tiene que ser constitucional y pacífica. Pero esa salida implica negociación y en toda negociación hay que ceder en algunos aspectos. No podemos descalificar a priori todo. Analicemos la situación con cabeza fría. Todavía estamos a tiempo de salvar a Venezuela.

@PabloPerezOf


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!