Ansiedad, adicción y desmemoria son algunas consecuencias del uso desmedido de las nuevas tecnologías como teléfonos inteligentes y tabletas electrónicas aseguraron especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

«El uso excesivo de estas tecnologías provoca en las personas ansiedad, adicción y desmemoria», señaló Julissa del Rosario Ibáñez Ruelas, psiquiatra adscrita al Hospital General de Zona número 71 en Veracruz, México.

Explicó que su empleo en largas jornadas puede provocar adicciones, sobre todo en los jóvenes, por lo que aconsejó a los padres de familia retrasar el uso del celular en los adolescentes con la finalidad de prevenir situaciones conflictivas a futuro.

«En especial, porque el uso constante de dispositivos electrónicos genera dependencia, la cual puede ocasionar disminución en el rendimiento de tareas escolares o laborales tratándose de personas adultas».

La especialista advirtió que existe una constante al presentar manifestaciones adictivas, cuanto más temprano les dan los papás el celular, la adicción es mayor y aumenta el aislamiento familiar.

De los 13 a los 22 años de edad, es la etapa en que se desarrolla una mayor adicción al uso de los aparatos, en donde también pueden influir factores como una baja autoestima y la necesidad de aceptación. Esto puede repercutir no solo en las relaciones sociales del individuo, sino también en su desempeño, como el ámbito laboral, puesto que no se van a cumplir al 100% las obligaciones laborales, mientras se hagan ambas acciones simultáneas.

La psiquiatra dijo que tener aparatos eléctricos encendidos cuando no es necesario hacerlo, así como dormir con el celular a un lado, puede contribuir a incrementar estados ansiosos porque el cerebro no descansa por dichos artefactos. 


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